Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

análisis

La misma receta para EE UU que para Europa

El expresidente de la FED señaló que la política no percibe "hasta que es demasiado tarde" los grandes retos de la economía

Recogido en un viejo monasterio de Sintra (Portugal) reconvertido en hotel de lujo, lo más granado de las instituciones monetarias, de los departamentos universitarios de macroeconomía y de los "euroexpertos" celebra estos días su aquelarre anual auspiciado por el Banco Central Europeo (BCE). Una de las intervenciones más esperadas era la del estadounidense Ben Bernanke, por su experiencia al frente de la Reserva Federal (FED) en dos periodos entre 2006 y 2014 y por su falta de ataduras al ya no estar en el cargo. El economista de origen judío señaló que la recuperación económica estadounidense tras la crisis llegó antes y fue más rápida que la europea en parte por su política monetaria, por esas compras de activos a las que la eurozona se sumó con retraso y sólo después de que Mario Draghi sustituyera a Jean-Claude Trichet a los mandos del BCE. No obstante, Bernanke advirtió de que a ambos lados del Atlántico "los problemas son similares" y que los políticos no perciben "hasta que es demasiado tarde" los grandes retos a los que se enfrenta la economía, entre los que citó la desigualdad, la desafección política y los desafíos sociales y tecnológicos que llegan con la digitalización.

El exdirigente de la FED durante las presidencias de George W. Bush y Barack Obama definió la política económica de Donald Trump como "un cruce del populismo y de las políticas de oferta tradicionales" y volvió a insistir en que Europa tiene los mismos problemas, "incluidas las tentaciones proteccionistas".

Si los problemas son similares, las recetas para superarlos, para conseguir una recuperación económica más sólida, también deberían ser iguales. El BCE se inclina por avanzar en las reformas laborales, pero Bernanke apuntó que se trata de medidas difíciles de poner en marcha con las que además no siempre se acierta.

No obstante, recomendó tanto a EE UU como a la UE reducir la protección de los trabajadores fijos y fomentar las políticas activas de empleo, que frente a las pasivas (sobre todo subsidios a los desempleados) se basan principalmente en la capacitación de los parados, en la intermediación en el mercado laboral (recogiendo las ofertas de trabajo y cruzándolas con la demanda) y en el formación continua de los trabajadores en activo.

El economista estadounidense defiende la aplicación de reformas pero "con la secuencia adecuada" y acompañadas por políticas fiscales, justo lo que Draghi lleva meses pidiendo a Europa.

Compartir el artículo

stats