Otros que pelean y mucho por mantener viva a la primera asociación cultural del municipio son los regidores del Ateneo Santa Cecilia. De momento, tras haber tenido que abandonar el local que durante más de seis décadas les sirvió de sede, con los bártulos amontonados en algún sitio, la actividad se lleva a cabo en los edificios municipales. La idea era adquirir un bajo que permitiese la autonomía de la entidad y con un par de asambleas realizadas para ello, se decidió la compra de un bajo ubicado tras la Biblioteca Vidal Pazos.¡Ah pero?!, resulta que con el acuerdo tomado, la junta directiva firmó un contrato de compra con el Banco Popular y todos nos hacíamos la ilusión porque, cuando se firma un acuerdo entre personas debe ser respetado hasta el final. Pero la banca es la banca y ya antes de la "desfeita" que dejó a los accionistas del Popular sin un duro pasando todo al Santander, el Ateneo recibió la mala noticia de que el compromiso era papel mojado porque alguien de arriba (seguramente los que iban a quedarse con todo) dijo que nanai, y que las condiciones ya eran otras. Que sepamos, el presidente y la junta directiva han remitido a las alturas de ese "cielo" bancario, un escrito reclamando el cumplimiento del compromiso pero parece ser que el Santander hace oídos sordos. ¿Que le queda hacer a Santa Ceclia en este caso? ¿pleitear?... "Pleitos tengas y los ganes", dice el refrán.
