Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La semana de A Ferrería

Lores y su jubilación

Lores optará a su sexto mandato y anuncia su jubilación a los 70 años dando ejemplo así a los restantes mortales a los que tanto nos enoja la simple posibilidad de que el Gobierno retrase la edad de jubilación para poder afrontar las pensiones.

A nadie ha sorprendido la noticia y más en un partido carente de líderes y de recambios aquí y allá. Casi al mismo tiempo el que fuera portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, anunciaba su marcha del partido disconforme con la línea que marca la actual dirección. Otro más de los cientos de nacionalistas que en la última década han saltado de este barco a la deriva. Debe ser un problema del nacionalismo incapaz de deliberar pausadamente. Ahí está el triste ejemplo de ayer en la Asamblea de Anova celebrada en Pontevedra, donde primero se liaron a tortas y después aplaudieron. Sin duda, la mejor forma de elegir un líder.

Miguel Lores y César Mosquera mantienen la llama del Bloque y lo harán hasta que den por acabada su vida política, entonces el frente nacionalista pasará a ser un partido más residual de lo que lo es hoy en día.

Ambos cuenta con el aval de haber lograro un gran apoyo social a su modelo urbano. Se vota a Lores, pero, la pregunta es: qué hay después de Lores.

La decisión del alcalde de presentarse nuevamente tendrá consecuencias en la elección del candidato en las restantes fuerzas políticas. El PP está en la obligación, como primera fuerza política de este país, de recuperar una alcaldía que consideró suya hasta 1999. Sin Lores podría tener opciones de mayoría absoluta, ahora deberá pensar en la posibilidad real de buscar candidato dispuesto a quemarse en la oposición cuatro años.

Marea y Luis Rei han dado un giro espectacular en solo dos años de mandato pasando a ser el mayor crítico de Lores a convertirse en un manso personaje que ha borrado de su vocabulario la palabra discrepar. Su cambio de actitud, forzado por acuerdos nacionales entre En Marea y BNG le deja muy tocado políticamente.

En cuanto al PSOE, sigue en su liorta interna que se extiende a nivel nacional y de hecho hoy está previsto que Patxi López esté en Pontevedra buscando el apoyo de los militantes en esta precampaña para liderar el partido. Un partido enfrentado y cuyas consecuencias se reflejan en la comarca, como dejó demostrado la visita esta semana de Pedro Sánchez a Ponte Caldelas. La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, que apoya a Susana Díaz, se apuró en la crítica a su compañero de partido, el alcalde Andrés Díaz. El regidor del tripartito apuesta muy fuerte y se la juega. Será que no tiene nada que perder y sí mucho que ganar.

Con este panorama, Lores y el BNG están tranquilos en Pontevedra. Que se jubile a los 70 es una buena noticia para el futuro de las pensiones, pero un dolor de cabeza para Alfonso Rueda y el PP.

Compartir el artículo

stats