Un libro es siempre un regalo no solo sutil si se elige bien sino socorrido para no caer en objetos que ocupan espacio innecesario. Igual que anteayer recorrí admirado el paisaje interior de la librería Letras Corsarias salmantina, ayer me dejé atrapar en Vigo por el maravilloso paisaje editorial de La Casa del Libro en compañía mariana, bueno, de María Rodrígez Couto, que no solo trabaja ahí sino que es quien tiene ese blog de Desayuno con Libros y su propio club de lectura en Vigo. Ya sabéis el eslógan: Si nada nos salva de la muerte, que la literatura nos salve de la vida. Así, a bote pronto y sin que medie interés comercial alguno, hallamos entre los libros que robaríamos el de James Rodhes, "Instrumental" (Memoria de música, medicina y locura); el de Fernando Aramburu, "Patria"; el de Angelika Schrobsdorff, "Tú no eres como otras madres"; el de Manuel Esteban, " A ira dos mansos" (Premio Xerais 2016); el de Lucía Berlín, "Manual para mujeres de la limpieza" (que yo regalé hace poco); las "Letras Completas" de Bob Dylan de Malpaso Ediciones; de Cristophe Galgard, "El universo en tu mano"; de William Finnegan, "Años salvajes"; de Bruce Sprinsteen, "Born to run"... ¿Os servirá de algo? En mi recorido salmantino por "Letras Corsarias" apunté otros títulos, aunque me traje un minilibro de los 80 escrito por un maldito: "La abolición del trabajo" de Bob Black. Me quedé con ganas de "El gran libro de los insultos", de Celdrán.
Más libros pero de Defreds
En ese "running" que hice por La Casa del Libro, su director, Juan Carlos Febrero, me presentó a un vigués que todavía no sale de su asombro por su éxito: José Ángel Gómez Iglesias, conocido por Defreds en las redes. Detrás de ese sobrenombre está un chico vigués tan normal. Enamorado de viajar, de los trenes y de escribir en cualquier espacio en blanco. Empezó escribiendo en las redes sociales sobre las cosas que piensa, desea y vive. De forma sencilla, pero directa. Dando rienda suelta a la imaginación en situaciones especiales de la vida de cualquier persona, y así escribió "Casi sin querer" y "Cuando abras el paracaídas". Me quedé con su teléfono para hablar más detenidamente.
Dos tríos de teatro y música
Me invitó Arantxa Treus, que debe querer alistarme en su organización Coños solidarios, a la despedida en Vigo de la pieza de bolsillo y risas "No es país para coños", cuyos ingresos irán a manos de A Rede de Mulleres Maltratadas de Vigo.Será en el mercado del Progreso a las ocho y media, hora imposible para mí porque estaré vestido de fiesta en el Twenty Century Rock con otros muchos para grabar un video de felicitación navideña. Pero a donde les da tiempo a ir tras la función a las tres actrices (Arantxa Treus, Deborah Vukusic y Rocío Romero) es a la actuación de otro trío pero musical, los vigueses AAF'60 (Alberto y Andrés Cunha y "Feluco" Otero) en La Fábrica de Chocolate, a eso de las 22.30. Después de algunos años sin tocar, se reúnen de nuevo para cumplir una misión: revisionar la música de los años 60 y 70 con gusto y una buena dosis de humor. Toda la música de tu vida .
Y Bibiano también
Y al final de estas líneas me llega por su hijo Danny la fatal noticia de la muerte de Bibiano Morón. Horrible para nosotros, sus amigos, Annus horribilis para la música, con la ida de Cohen, Prince, Bowie... Ahora, en nuestro ámbito, Bibiano.
