Pero ¿qué han hecho en la Sexta de El Corte Inglés, que está que no la conoce ni su padre? Patti Blanco, el eficaz Relaciones Públicas de esta institución pero también poeta, nos lió a comer allí a un puñado de fieles y me encontré un cambio radical, oferta diversificada con restaurantes como La Pepita, Mamma Mía y A Ultramar (de Xosé Torres Cannas o sea Pepe Vieira), doblado el espacio, con lleno y una estupendísima terraza para comer desde las alturas. Me fui allá con Pepe Cadavedum y "la voz", o sea Marian Priego (dice ella que se llama Priego, para mí que es Prego), saludamos a Xosé Cannas y, tras darnos su bendición, nos deslizamos en su bar por una pendiente de placeres, a base de bocaditos: un sushimi de apionabo con mostaza y queso azul, un steak tartar de vaca gallega con aliño de mostaza antigua, unas verduritas asadas a la llama con lascas de parmesano y yema de huevo, una pechuga de pollo salteada al wok con salsa Hoisin (en la carta, General Tso´s Chichen) y unas costillas de cerdo barbacoa con patatas asadas. Paco Gil, gastrofilósofo, comía con delectación, Cadavedum me servía cada poco un Ribera Quinta Milú, Priego rompía por enésima vez su dieta , Tono Mugico hablaba de su revista BenBo... Al final no hubo más remedio que tomar un gintonís, en la terraza, yo y Patti de London. El Corte ha hecho buena cosa para comer en su Sexta, subió enteros en Bolsa. Y abre algunas noches.
Una comida con Telmo's
Eso fue anteayer porque ayer quedé otra vez con Pepe Cadavedum a la hora aperitiva en el Compostela y acabamos comiendo por azar con Telmo's en El Capitán. En estas fechas todo es bebercio o comercio. Un pulpito y un guiso de corujo. Fuimos sobrios menos en la conversación, porque Telmo´s no solo es un ávido lector de prensa desde siempre sino que tiene una memoria de elefante y datos sobre un Vigo real y otro no menos real pero más oculto, y en parte secreto. ¡Ay, aquellos tiempos en que trajo a Cicciolina a Vigo y despertó más expectación en prensa que un presidente del Gobierno! Dígase lo que se diga de su personalidad controvertida, Telmo, que fue cantante y político incipiente en la Transición además de lo que se sabe o se inventa, tiene una memoria de Vigo de novela. Un día os contaré algo más, bastante más si me dejan.
No es país para coños, coño
¿Es este un país para coños? No, o al menos eso me he dicho a mí la tan joven como lúcida periodista y guionista gallega Diana López Varela, la que se hizo un cuarteto con Déborah Vukusic, Arantxa Treus y Rocío Romero y las mandó a todas al ginécólogo para que hablaran de sus cosas no más de media hora convertido todo en una obra de teatro breve y regocijante: "No es país para coños". Esa es su pieza teatral de bolsillo. Pero Diana tiene también un interesante blog de factura no sé si feminista o así pero algo iconoclasta, y un libro de igual título que la obra teatral que hoy a las 8 presenta con el debido coñocimiento en el café Detrás do Marco, acompañada por la gozosa Arantza Treus.. Vuestras son.
