Atentos quienes queráis pasear por el Museo del Mar con un guía. Hoy a las 18.00 o el domingo a las 13.00 son las últimas dos ocasiones de asistir a una visita guiada de la exposición "Pontedeume, 150 anos dunha vila mariñeira", una poderosa aportación al patrimonio icónico gallego, que lleva mes y medio en el Museo do Mar. "Una foto se convierte en icono de una época cuando a muchos les evoca momentos o sentimientos íntimos," me dice su comisario Xavier Brisset. Cierto, cuando Tito Ríos fotografió a Maruja "a leiteira", en Pontedeume, de frente y mirándole a los ojos, había miles de esas mujeres repartidas por las parroquias y villas gallegas? Gente como yo andaba correteando por el casco histórico rebosante de pequeñas tiendas y talleres, y Brisset, que vivía entonces en Vigo y ahora en Pontedeume, corría por un Canceleiro sin adoquines ni asfalto. Maruja, sin conocerla, a ambos nos recuerda el mundo y los sabores de la infancia. Mejor que los generales a caballo, las marujas en su burro anunciaban el fin de la economía del trueque en el rural y la entrada de Galicia en la época industrial. Alemania, Astano, Citroën y Larsa, mezclados en un mismo cántaro. Pues bien, de éstas fotos evocadoras tenemos varias en la exposición que clausura el domingo.
Dorotea dejó sus Memorias
Se nos fue la actriz Dorotea Bárcena, a quien tuvimos la suerte, para ella ilusionante, de hacerla protagonista de nuestra sección Memorias hace solo unos meses. Tenemos de ella el último testimonio vital sobre toda su vida, que comienza por una frase tierna y memorable: "Cuando abrí los ojos por primera vez pude entrever un tupido bigote negro rodeando una blanquísima y perfecta dentadura. Bigote y dentadura sonriente, eran las señas inconfundibles que yo asociaba con mi padre. Así quedó grabado en mi recuerdo. Aquel era mi adorado papini. El que un día desapareció y me dejó en una eterna espera de su regreso". Qué hermoso modo de contar el primer momento de su vida, que luego continuó desde su llegada a Vigo en la infancia, sin saber lo poco que le quedaba para el último. Ya ha cerrado esta etapa, y ahora ha vuelto, seguro, con ese padre suyo cuyo regreso siempre esperó. No me olvido de nuestras noches en la barra del Plaff, Doris, cuando aún te desplazabas a Vigo entre bastones y dormías en casa de la Lolailo Domínguez.
Swing en el Mercado, venid
Pero la vida sigue, y hay que bailar para ahuyentar la mala suerte. Ayer estuve con la ascensional Bego Arana en el Cantamañanas,el bar que tiene Juanjo Figueroa de Treus en el Urban Market vigués. Y, mientras tomábamos un vino, clavó en mí su pupila azul (bueno,como si fuera), encendió de deseo sus ojos y me dijo: Cari, te lo tengo que decir. Los chicos de Swing on Vigo, que están en O Almacén Cultural, (Avda Ramón Nieto 58), plantean un taller gratuito de media hora para los más atrevidos, hoy, a las ocho y media. ¿Puedes difundirlo a los 4 vientos, mi bien? Ellos son los que arrancarán en la pista de baile del Espacio Mahou del Mercado de Progreso 41. De la música se encarga el Dj Juan de Hang Over, especializado en música de los años 40y 50 con Alexandre Touceda, Virxilio da Silva y Jimmy Glass, tres músicos de jazz que trabajan juntos.Por cuatro euros, podéis integraros y aprender.
