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Luis M. Alonso.

sol y sombra

Luis M. Alonso

La libertad de elegir entraña riesgos

La incertidumbre nace de la libertad de elegir y casi nada es tranquilizadoramente previsible en los tiempos que corren. En Estados Unidos han escogido a Donald Trump, un ser lo suficientemente despreciable en sus maneras y en su discurso para que la inteligencia se sienta ofendida. Sin embargo el resultado está ahí. Una mayoría muy cualificada de estados decidió que sea su presidente los próximos cuatro años. Inmediatamente se han puesto en marcha movilizaciones para oponerse a la legítima realidad. En algunas de ellas ha resultado especialmente ingenuo y hasta conmovedor el lema de las pancartas: "Trump, jódete", teniendo en cuenta que los realmente jodidos somos los demás, que vemos en él una amenaza vociferante y protofascista, a un tipo que maneja soluciones políticas engañosas y no se cansa de demonizar a quienes no comparten su ideario del odio. Pero que ganó democráticamente las elecciones. Naturalmente no hay que descartar que muchos de sus partidarios, incluso con él al frente, habrían hecho lo mismo si se hubiera producido el resultado contrario. El propio Trump, en el gesto más repugnante de su campaña, se mostró dispuesto solo a aceptar el resultado de las votaciones siempre y cuando fuera el ganador.

Los que ahora enarbolan las banderas contra el futuro presidente de Estados Unidos practican el mismo juego peligrosamente antidemocrático: aunque en un plano inferior de la responsabilidad de cualquier candidato en una democracia se sitúan a su altura en intransigencia. Este circo de la movilización contra lo que no gusta y participa de la misma forma de ver las cosas, resulte o no avalado por hechos incontestables, se está poniendo peligrosamente de moda. Solo hay que recordar la iniciativa "rodea el Congreso" que promovió no hace demasiado una manifestación en la investidura de Rajoy que, pese haberse impuesto en las urnas, en diciembre y junio, era demonizado por la intolerancia populista que cercó el Parlamento como si lo que ocurría allí dentro fuese un acto contrario a la voluntad del pueblo.

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