La Fundación FUNCAS acaba de publicar un número de su revista Panorama Social de gran interés para España y, en particular, para Galicia. Porque es verdad que el conjunto de España tiene problemas similares a los de Galicia, pero aquí aparecen extraordinariamente acentuados. Baja fecundidad, envejecimiento acelerado, despoblación, presión creciente sobre servicios sanitarios y sociales? Por eso me atrevo a decir que junto al uso del suelo son los dos problemas estructurales clave para Galicia, en los que los esfuerzos de consenso sociopolítico y, de ahí, legislativo, presupuestario y de diseño de políticas públicas son particularmente relevantes.
Todo lo que se dice en el número tiene interés y debería ser incorporado a nuestro propio debate. Pero en esta columna voy a céntrame en dos dimensiones fundamentales. La primera es la importancia fundamental de las familias para el bienestar. El gráfico adjunto muestra el porcentaje de mujeres mayores de 60 años que no recibieron ayuda de su familia o amigos cuando tuvieron un problema de salud. Frente al 67.9% de las suecas, el 13,2% de las españolas; porcentaje que seguramente sea menor en el caso de Galicia. La segunda de las figuras refleja el gasto en políticas de familia. Estamos a la cola de Europa.
La ecuación está clara: las familias hacen lo que no hace el sector público. Pero parece que no es suficiente viendo lo que pasa con la natalidad. Y la situación tiende a empeorar, porque las familias en sentido extenso reducen su tamaño y por tanto capacidad de funcionar de red; las mujeres están plenamente integradas en el mercado de trabajo, con lo que su capacidad de soportar sobrecargas, como históricamente han hecho, se reduce; y la movilidad laboral aumenta, alejando a los miembros de las familias entre sí.
Haz click para ampliar el gráfico
Sin duda, necesitamos políticas de familia más ambiciosas que permitan que la familia siga siendo lo que todavía es en este país.
*Director de GEN (Universidade de Vigo)
@SantiagoLagoP
