Hoy sábado me levanto y pongo a Estrella Morente como fondo de la escritura, pero no puedo olvidarme del ensamblaje de músicas que el viernes vivimos sin movernos del marco del barrio viejo. No os lo creéis pero para recibir la noche blanca, con nuestros centros de arte abiertos hasta la madrugada, podríais encontraros a la Unión Musical de Valadares en un lado de la Plaza de la Princesa aplaudida por un público que la despidió en pie, y a un grupo de rock al otro lado que esperaba su despedida para cambiar de género musical; pero si subías hasta el Paseo de Alfonso, podríais oír el reggae buenísimo de los Natural Green, si torcías a la izquierda hacia la Praza do Rei a un grupo del Marisquiño y si bajabas tropezarías primero con las fanfarrias de la Balkan Paradise Orquestra y, más abajo, en el Náutico, a un grupo de DJs iluminando también sónicamente el programa de O Marisquiño.
Un viernes superexplosivo 2
Ah, pero si os dirigíais hacia la Casa das Artes podríais haber asistido al concierto hip-hop con que Aid inauguró Magical Girls.la exposición multidisciplinar que quiere ser un retrato generacional de la nueva producción artística femenina del área de Vigo. Pero mágico, sensacional, fue también, según me contó Xesús Franco, el gran espectáculo que a las mismas horas de la noche del viernes "blanco" se vivió en el Museo del Mar : lleno total de gentes diversas, familias, mayores, niños... para gozar de la acción de un ensamblaje de 13 violines, 3 violas y un bajo que se movían con sus instrumentos por el Museo convirtiéndolo en espacio escenográfico mientras tocaban clásicos conocidos con una coreografía excelente. ¿Son posibles más cosas al mismo tiempo y en un área céntrica tan reducida?
A Cañiza, de jamón en jamón
Yo ese viernes comí en casa del probo industrial retornado Benito Pereiro y su ex mujer Samanta Buendía, no en su casa de verano cerca del poeta de Meder José Antonio Fontán, sino en la del barrio viejo vigués. Nos pusieron una carne a la piedra excelente que le compraron a Benito el carnicero de a Cañiza, que por cierto cele.bra mañana su "Festa do Xamón". Benito y Samanta aprovecharon su visita por razones carnales a este pueblo entrañable para tomar un jamoncito y un pulpito en la de Félix "Xatomé", toda una institución viva y de nuestra memoria, donde hallaron al pregonero de este año, José Luis Vacelar, el dueño del estanco que, por cierto, le dijo señorialmente a Félix: "Estos señores, que no paguen lo suyo" . Buena la gente de A Cañiza.
