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desde mi atalaya

Manuel Torres

Fiestas del Carmen

Finalizadas las fiestas del Carmen, en otro tiempo celebradas alrededor del 20 de agosto, nuestra villa vuelve a la normalidad, es decir a la monotonía ordinaria, apenas perturbada por la presencia de algún nuevo veraneante o turista, como ahora se les denomina, y siempre con la presencia de los fieles de antaño, que desgraciadamente ya van quedando menos. Pero bien podemos decir que quizás estas fiestas del Carmen 16 fueron las mejores en muchos años, con infinidad de actividades para mayores y niños, con una gran variedad de acontecimientos festivos que fueron del agrado de los marinenses y visitantes, y que divirtieron a todos, sin olvidar las magníficas orquestas que este año actuaron día tras día para animar a los marinenses y a la gran cantidad de vecinos que estos días vimos por las calles y plazas de nuestra villa, tomándola literalmente, ocupando bares, cafeterías y terrazas, ayudado por el espléndido tiempo del que disfrutamos. Hacía mucho tiempo que no veíamos tanta gente, sobre todo de pontevedreses que invadieron las plazas sobre todo el domingo día 10, señal inequívoca del interés.

Comenzaron las fiestas con el magnífico pregón, con un estilo nuevo e innovador, que demuestra la competencia del marinense Carlos Prado en estos medios, al que felicitamos por su magnífica puesta en escena, donde respiraba su gran amor a la tierra que le vio nacer y que lo convierte en un embajador de lujo de nuestro "terruño". A lo largo de la semana, podemos decir que la mayoría de las actividades programadas fueron del agrado de todos, pero nos gustaría destacar la cabalgata de la denominada "Batalla de flores" y la procesión del Carmen, que como siempre estuvo concurridísima, y con la devoción y el compromiso de costumbre de los marinenses , y un año más la imagen fue transportada por el remolcador de "Amarre Marín", de Antonio Alonso, al que agradecemos su compromiso de estar siempre ahí y dispuesto a colaborar. Y finalmente nos gustaría destacar la gran tirada de fuegos artificiales, que éstas si, hicieron las delicias conjuntamente de mayores, menos mayores y pequeños. Espectacular, ¡lástima que no duraran un poco más!

Pues eso, finalizo el ciclo de fiestas del Carmen 2016 con sabor de boca agradable por lo que debemos felicitar a los organizadores, la corporación, que un año más estuvo a la altura que nuestra villa se merece. Porque así también se hace marinismo activo.

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