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Antonio Touriño

El mirador de Lobeira

Antonio Touriño

Celos y envidia reñidos con la seguridad

Los celos profesionales son siempre positivos pues significan ni más ni menos que afán de superación. Pero como cualquier exceso puede quebrar la cuerda y que el buen propósito acabe en desastre, cuando no en tragedia porque las envidias están reñidas con la seguridad. Viene ello a colación del conflicto suscitado por Protección Civil y Bomberos de Vilagarcía tras la falsa alarma de escape de gas en el colegio de las Filipenses, pero también por la inexplicada decisión de apartar a los voluntarios de O Grove del cuartel de emergencias de Borreiros.

Las crisis deben servir como revulsivos y en estos casos más. Los dos servicios no solo son necesarios en las localidades sino que deberían complementarse. Nadie imagina que un cirujano prescinda del equipo de enfermería en el quirófano, o lo que haga el uno lo deshaga el otro.

Ahora sí, cada cual debe conocer sus funciones. Solaparse suele tener consecuencias nefastas y arrogarse papeles o competencias de otros generar un caos. Para algo se creó el 112 como órgano de coordinación de los servicios de emergencias de Galicia, cuyo objetivo no es la economía de recursos sino la racionalización de los mismos. Parece poco razonable que a una falsa alarma o a una colisión de chapa acudan cuatro vehículos con su respectivo personal o que acudan voluntarios, efectivos de emergencias, bomberos, ambulancias o agentes de los tres cuerpos policiales. Total para regresar de vacío.

Pero puede darse la circuntancia de que ocurra algo grave y que el primero que tenga que socorrer ni tenga la competencia para hacerlo ni los medios adecuados.

Por falta de coordinación puede agravarse una catástrofe. Y después ¿quién se echa las manos a la cabeza?

Los Ayuntamientos, como el de Vilagarcía y el de O Grove, tienen mucho que decir. En definitiva sus alcaldes son los máximos responsables de supervisar lo que hacen estos cuerpos para que su ciudad sea segura.

Los vecinos pagan impuestos para que estos servicios sean eficaces, especialmente en los momentos más complicados. Llegar a un acuerdo de caballeros no debería ser difícil, pero lo que está claro es que sí sería muy útil.

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