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Javier Sánchez de Dios.

Crónica Política

Javier Sánchez de Dios

Los equipos

Así que, por si alguien dudaba aún acerca del alcance que de la anunciada "renovación" en el PPdeG, un dato puede despejar la incógnita; la elección del señor Santalices como presidente del Parlamento gallego. Releva a doña Pilar Rojo, que eligió convertirse en probable diputada de la oposición en las Cortes abandonando su alta condición aquí, en decisión que salvo ella y su entorno pocos entendieron y que además causó críticas externas e internas cuando la tomó,

No se trata, desde luego, de negar la capacidad política de su relevo, que se demuestra sobradamente con su supervivencia como diputado en provincia tan complicada como Ourense, y que exige saber apostar por el que manda. Pero, aunque hay otras opiniones, la dirección popular, sin aventuras, tenía candidatos que casan mejor con la supuesta nueva imagen que predican como resultado de los anunciados congresos provinciales y regional.

La verdad es que trabajo para conseguirla -la renovación- no les va a faltar. Porque quien ha gobernado este país casi siempre sigue sin entender del todo que los tiempos han cambiado, que lo que ahora cuenta es la proximidad a la gente y, que para eso son precisas caras nuevas -no sólo jóvenes- con capacidad para la política, que la honestidad transparente sea regla y, quizá sobre todo, recuperar el cierto galleguismo que supieron darle Fraga y Cuiña y que fue clave en su trayectoria.

Es cierto que algunos de esos elementos, sobre todo algunos fiscales, trataron de corregirse tras la dolorosa -e inútil- victoria de mayo de 2014 pero le falta mucho de lo principal. Sobre todo visualizar las novedades con gente distinta, acabando de una vez con las puertas giratorias, uno de los escasas aciertos en las denuncias del radicalismo.

Doctores tiene, por supuesto -y mucho, además, la iglesia popular que deberían haber detectado y ayudado a corregir los defectos. Pero parece un hecho que a día de hoy el partido de gobierno -y por tal condición lo que le pasa afecta a todos a interesa a muchos- no acaba de entenderlo ni de aplicarlo. Y eso que su principal activo, que sigue siendo el presidente Feijóo, lo sabe de sobra.

La cuestión, pues, es por qué no se emprende la tarea de potenciar gente con capacidad y se habla sólo de "renovación de equipos"; quizá pensando en mantener los responsables de los actuales. Y, si fuera así, es muy probable que desde la dirección cometerán otro de sus graves errores; parecido al que le ha costado una sangría de votos en las últimas elecciones.

Tiempo habrá, y acontecimientos, para fijar quién tiene razón, pero los indicios no animan, precisamente.

¿Eh...?

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