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El transporte metropolitano es cosa seria

El transporte colectivo es una de las mayores urgencias de los alcaldes metropolitanos. Pero claro, la excelencia en la movilidad pública necesita un estamento propio que la gestione y planifique. El transporte no se puede introducir en el saco del Área Metropolitana, sin más, pensando en el autobús de la lechera. Para resolver los problemas de movilidad no llega con la simple conexión horaria o tarifaria, sino que es necesaria la implantación de una red integral como sistema de transporte público metropolitano, para garantizar un servicio de buena calidad.

Sería insensato desperdiciar la creación de una entidad pública histórica, dotada de personalidad jurídica independiente. Esta sociedad debe tener relación -que no vinculación- con el Área Metropolitana, y que en modo alguno sea un señuelo que justifique la existencia de esta. Una cosa es el AMV y otra cosa es la estructura que coordina el transporte metropolitano, llamémosle Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Vigo, por ejemplo, integrado por la Xunta, la ciudad de Vigo, Diputación Provincial y los concellos que se adhieran a esta administración consorciada. Es decir, que este Consorcio -o como se le denomine- ejercería las competencias que le correspondan en materia de gestión de servicios e infraestructura de transporte, dentro del territorio de los concellos consorciados.

Convendría elaborar un Plan de Transporte Metropolitano, que ordene y coordine todos los servicios del transporte público, su marco tarifario, su intermodalidad y que promocione una imagen unificada de todo el sistema de transporte de Vigo y su Área. Este Plan puede contemplar una estrategia para el Transporte del AMV, la coordinación del servicio de la concesión urbana de Vigo con los interurbanos, y el fomento del uso de los transportes públicos metropolitanos: bus, barco, taxi y tren de cercanías, así como los buses lanzadera a Peinador.

La imagen de marca común de los diferentes operadores interurbanos, debieran quedar postergados a la aprobación del Plan de Transportes. El marco tarifario y de servicios debería realizarse por fases, según el avance de la movilidad de los diferentes operadores y concesiones, para garantizar el beneficio a los usuarios en todos los servicios; por ejemplo, es necesaria una nueva planificación de las viejas rutas metropolitanas y el estudio de costos. La mayoría de los itinerarios tienen más de cincuenta años de vida.

A pesar de las tensiones aparentes, son necesarios acuerdos entre las administraciones de la Xunta, Diputación y concellos afectados en el Plan de Transporte Metropolitano de Vigo. Otra cosa es que el Ente provincial pueda jugar un papel decisivo en el futuro metropolitano, una vez que la Xunta dé su aprobación definitiva a la ley. Hay nuevas alternativas para salir de la trinchera.

*Publicista

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