Llegaron como el invitado de piedra a una Copa Asobal en la que nadie podía contar con ellos. Lo hicieron con la humildad de toda la temporada, en unas furgonetas que contrastaban con los medios y el glamour que exhibían sus competidores. Y, a pesar de una derrota cantada, lo disfrutaron como nunca. Nadie se lo quiso perder. Pillo ofreció a varios jugadores la posibilidad de no saltar a la pista para no agravar sus dolencias, pero su oferta fue ignorada por completo. Allí cumplió todo el mundo, como llevan haciendo a lo largo de la temporada, y no se podía perder la oportunidad de escribir su nombre en una nueva página de la historia del Balonmán Cangas.
Las botas de goma, equipación obligada
Ni traje ni corbata ni zapato fino. Las botas de goma son el nuevo complemento al que deberán acostumbrarse los políticos de Bueu, al menos si tenemos en consideración los últimos problemas de inundaciones en el centro del concello. Sin recordar siquiera de lejos las vividas hace años, lo cierto es que ayer más de uno bromeaba con que los hosteleros de Johán Carballeira y la Praza Massó podían desplazarse en piragua por el lugar.
