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Xabier Fole

el correo americano

Xabier Fole

Rajoy y las ballenas

El video electoral del Partido Popular sobre un supuesto hipster decidido a inclinarse por la opción conservadora en las próximas elecciones generales da mucho que pensar. Multitud de preguntas surgen tras su visionado. En primer lugar, no sabemos a quién va dirigido el argumento. Uno intuye que los hipsters, tal y como se los imagina Moragas -son "veganos", van en bicicleta a trabajar y salvan a las ballenas en verano (solo en verano)-, no deben de sentirse demasiado persuadidos por las ideas sugeridas en el cortometraje. Más bien al contrario. Observar cómo la pretendida subcultura se ve reducida a unos pocos estereotipos encarnados por algunos miembros de Nuevas Generaciones no tiene que ser una experiencia agradable para el sufrido iconoclasta. A los autores de la obra propagandística, si no estuviéramos en época de elecciones, se les podría conceder el mérito de exponer con cierta gracia, aunque sea de manera involuntaria, la gran contradicción que ha padecido Brooklyn durante los últimos quince años debido a su inexorable proceso de "gentrificación": los hipsters, en realidad, no son más que jóvenes peperos disfrazados. Hallazgo curioso pero no muy efectivo, sospecho, desde el punto de vista electoral.

Al descartar esa posibilidad, entonces, nos queda pensar en que el equipo de Rajoy se está enfocando en el pueblo en su conjunto. "Piensa sin prejuicios", nos dicen. Más allá de nuestras barbas, atuendos, gustos musicales y costumbres más o menos progresistas, todos aspiramos a una cierta estabilidad y nadie quiere ser rescatado. Además, las otras alternativas, asegura con resignación el protagonista del relato, no generan mucha confianza. "Tengo que ser sincero", advierte. Echen una ojeada al resto de los candidatos y comparen. Acabarán apreciando lo malo conocido. De nuevo, yo o el caos. No deja de ser curioso cómo incluso en un intento de promover las virtudes del partido se sigue insistiendo en las mediocridades de los otros. Sin embargo, la clave de la trama se sitúa al final de la cinta, cuando el personaje, después de confesarse con sus decepcionados amigos, afirma: "Rajoy no tiene nada en contra de las ballenas". Este podría haber sido el eslogan del Partido Popular para las elecciones. Recorrerse los pueblos de España con esa frase estampada en el exterior del vehículo habría convertido la campaña electoral en una obra maestra. Es complicado no votar a un presidente entre cuyas virtudes se encuentra la de ser respetuoso con los cetáceos. La lucha por el centro político provoca este tipo de homenajes berlanguianos.

Pero el objetivo de la propaganda sigue siendo un misterio. Desconocemos cuáles son las intenciones de los creadores y a quiénes están tratando de convencer. Los hipsters, representados como arquetipos de la izquierda exquisita, no salen muy bien parados. Y parece difícil que algún indeciso cambie su opinión después de ver este video. Lo llamativo, quizá, es la contribución que hace dicha promoción al mensaje que ha tratado de transmitir el Partido Popular a lo largo de la campaña. Al igual que los miembros de la administración Barlet en El Ala Oeste de la Casa Blanca, los estrategas del PP han llegado a la conclusión de que es mejor "dejar que Rajoy sea Rajoy". No para revindicar su auténtica ideología y elevar el debate público del país, como sucedía en la serie, sino para exteriorizar las cualidades personales de un "hombre normal" que, a pesar de ver los debates sobre su legado desde Doñana y mandar a la vicepresidenta en su lugar a "jugar en equipo", no tiene nada en contra de las ballenas. Abandonemos nuestros prejuicios y demos una oportunidad al "centrista", como diría Bertín, ya que esto no nos impedirá seguir amando la fauna marina y movernos en bicicleta. El problema es que, al contrario de lo que se afirma en el video, su partido no es "el más votado porque nos vota gente muy diferente". Es el más votado cuando sus bases deciden acudir a las urnas el día de los comicios. De ahí que la propaganda se transforme en parodia.

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