El paseo de Seara

Después de aquel desgraciado accidente n el taller de carpinteria de don Pedro Casqueiro, deambulaba por la calle del frente costero de Moaña, (hoyConcepcion Arenal) una persona que no hacía mas que lamentarse de la tragedia ocurrida a la familia, aquella persona vestida de negro con su pañuelo que le cubría su pelo; iba pidiendo ayuda monetaria para levantar nuevamente la carpintería para tener ingresos para mantener a su familia. Aquella persona que tanta solidaridad pedía a su pueblo como Moaña, que tanta gente le ayudó como pudo y como se podía en aquellos años tan difíciles para todos, tuvo las suficientes ayudas para levantar nuevamente la carpinteria de ribera, y ese mar tan duro que a veces provoca una verdadera marea de solidaridad encomiable, digna de agredecer de cualquier persona que tenga voluntad de reconocerlo con el cabo de los años . Esa persona no era otra que doña Teresa, la mujer de don Pedro Casqueiro, con los años transcurridos algo siempre queda y desgraciadamente otras se quedan en el olvido aunque no para todos y esas pequeñas cosas se recuperan con el paso del tiempo y ello es lo que hace grande la historia de un pueblo. Aquellos que queremos recuperar parte de la historia por las formas de comportamiento de aquellos a los que su pueblo con su solidaridad ayudó a salir pensando en el futuro, no podemos olvidarnos de lo ocurrido por aquellos años.