No se habla de otra cosa que de la preparación del "Marín 2020" para aprovechar los cuartos que aún manda la Unión Europea para proyectos serios que ayuden a desarrollar a los pueblos. Aquí tenemos el antecedente del proyecto Arela que el bipartito (PSOE-BNG) supo gestionar y el gobierno del PP también supo rematar cuando tuvo que jugar con la ejecución no sé cuantas veces aplazada que al final estuvo ajustadísima en el tiempo y en la forma (recuérdese el conflicto con Antalsis que no estuvo a la altura de las circunstancias). Ahora hay una nueva posibilidad de conseguir fondos importantes pero no es lo mismo, aunque la idea sea mejorar las villas en aspectos importantes. Es un momento decisivo para poder hacer llegar las ideas y aspiraciones de la gente y de los diversos colectivos al equipo que se va a encargar de recoger las propuestas y se necesita, en primer lugar, conocer bien qué es eso del "Marín 2020" y cómo las proposiciones que se hagan puedan servir para algo. No se trata de pedir que le asfalten a uno la calle o que le pongan una fuente en el barrio, sino estructurar un Marín del futuro para lo que se necesitan, precisamente, ideas de futuro. Los grupos políticos tienen mucho que hacer sin ponerse zancadillas. Veremos.
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