Ardo en deseos de acabar estas líneas porque es casi la hora de comer y voy a freír unos pimientos de Padrón con denominación de origen, o sea de Herbón, que me acaba de traer Germán Lago, exfenosero y fotógrafo vocacional a punto de publicar libro sobre la ría de Pontevedra. Yo si no son de Herbón, paso. Los pondré para picotear antes de atacar unos moluscos cefalópodos en forma de chocos. Lo de moluscos cefalópodos lo aprendí del periodista Fernando do Monte, que lleva la comunicación del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño en Galicia. El otro día cerró con su intervención las jornadas técnicas de la Fiesta del Marisco en Vigo y su ilustrada pero amena charla me permitió entrar en ese mundo del marisco que tanto comimos pero sin saber que comíamos moluscos bivalvos, gasterópodos o cefalópodos, crustáceos decápodos o cirrípedos (percebes), equinodermos equinoideos o holoturoideos... Fernando, que nos pintó la situación de nuestras costas con magníficos trazos, mantuvo la atención erecta de oyentes como el adalid portuario Carlos Losada, el presi de la Cooperativa de Armadores Javier Touza, el gerente de los hoteles vigueses Mariano Martínez... Y yo que le conozco hace décadas y nunca me habló de cirrípedos.

De inspección por el barrio

Me echo las manos a la espalda y hago una inspección por el barrio para comprobar las novedades con el probo varón y vecino Manuel Martín "Vazey"", y comienzo por la Alameda. Allí, donde tanto tiempo estuvo el restaurante chino, está ahora Sentido Cocina, restaurante con un ambiente de diseño luminoso y acogedor, cocina sencilla y ocurrente. En una mesa de terraza, mira por dónde, estaba Miro Carballo, que nos cuenta que anda liado con la colaboración para el próximo Desafío Cíes, en donde Icónica Sports, la Clínica que gerencia en la misma alameda, aportará el apoyo de recuperación a los competidores con un amplio equipo de fisioterapeutas. Cruzamos y, en la misma plaza, otra novedad: Vitruvia, al lado del Mesón Compostela, en donde se acaba de abrir un clásico y tranquilo concepto de cafetería con ambiente musical relajante y piano en la planta primera. Tomamos un vino y, a 50 metros, en la calle Reconquista, visitamos el Taiyo Sushi, recién inaugurado restaurante japonés. Para sorpresa final, vamos a Marqués de Valladares y en la trastienda de La Chinata catamos el caviar de aceite de oliva virgen, un nuevo y original concepto de saborear el aceite en cápsulas. Rematamos en el gastrosótanos del Vazey probando unos fiambres y acariciando un Vega Sicilia Único de 1970, que no toca descorcharlo al no aparecer ningún espléndido que invitara desembolsando los 1.200 euros que cuesta.

Y una de medicina natural

Nosotros comiendo sin contemplaciones ni respeto al ácido úrico y el vigués Fernando Magdalena senior en Vilar de Perdizes-Montalegre, tierra portuguesa, en un congreso de medicina natural. Allí estuvo entre puestos de plantas medicinales, extractos, cremas,... Magdalena habló sobre el tratamiento natural de la depresión, y uno de los oyentes vigueses fue Juan Martins, ya que no pudo ir en esta ocasión otro invitado, Carlos Rodríguez, de Eko-Huerta Medicinal. Por cierto, debo decir al padre que, mientas él estaba de dieta en Portugal, su hijo el marchante de arte Fernando Magdalena atacaba una fuente de marisco en las Jornadas Marisqueras del Berbés con una bella dama. También es cierto que el "pater" se va a resarcir hoy en la merienda-cena que va a hacer en su casa de campo, con gente de la música como el cantante Rafael Amor. Acabarán bajo las estrellas esposados al gin tonic, entre guitarra y canciones.