Nos preguntamos los vecinos por qué nos están tomando el pelo en el Ayuntamiento. Han comenzando el arreglo de la calle Blanco Porto, tan necesario, la separación de las fluviales de las fecales, ampliación de las aceras, como dicen ahora para humanizar la calle y resulta que está más deshumanizada que antes, llegando a dejar en una acera hasta cinco contenedores.

En vísperas de navidades, por la incomodidad de las obras y ante la protesta de los comerciantes y vecinos, pues había una promesa hecha por el teniente alcalde Antón Louro, que las obras se terminarían antes de Navidad, "que no se cumplió.

De repente se recogieron las máquinas y dijeron que las obras se harían después de Navidad. Sin embarog, los obreros nos decían que se habían terminado por falta de presupuesto.

Se ha arreglado hasta el número 10, de ahí hasta final, nos castigan diciendo que no hay dinero, nos parece muy injusto y nos sentimos discriminados, por considerar, que pagamos los mismos impuestos , y tenemos los mismos derechos.

Hay dinero para arreglar Loureiro Crespo, pero para terminar las obras de Blanco Porto no. En los 40 metros que quedan sin arreglar, han puesto demasiados contenedores: tres de materia orgánica, dos de plástico y uno de vidrio y otro de papel. Esto consideramos un castigo, por el mal olor y restos de basura, que hay en el suelo, pues hay ciudadanos, que por fastidiar , dejan las bolsas fuera, que abren las gaviotas

En la calle Cruz Gallastegui, no tienen contenedor de materia orgánica, por lo que también dejan bolsas fuera. Por lo que la imagen de la ciudad es pésima, y la culpa es de los ciudadanos, que son unos guarros. Lo único que queda es sancionar.

Los vecinos de Blanco Porto estamos muy enfadados y estamos decididos a presionar al Ayuntamiento, hasta con cortes de tráfico. Las promesas hay que cumplirlas.

* Presidenta A.VV San Bartolomé Centro.