Tenemos constancia absolutamente verídica de que es así. La comarca recibió estos días muchos visitantes, unos muy interesados en la Semana Santa y otros a los que les interesaba más procesionar hasta los furanchos. Y es que la fama de los loureiros de O Morrazo traspasa las fronteras de la comarca. Bueno, también hubo quien fue a la procesión y luego se fue a tomar el vinito y la empanada al furancho.