Están ellos y estamos los demás, o sea, nosotros. Este "nosotros" incluye a la gente que cuando se casa se gasta lo normal. Según un estudio de la Federación de Usuarios Consumidores Independientes publicado hace un año, el precio medio de una boda en España iba de los 12.000 euros en Extremadura y Canarias a los 17.550 en Madrid. La media se situaba en los 14.390 euros. Una cantidad bastante inferior a la que presentó un estudio equivalente en 2005, que fue de 24.500 euros. Se nota que en la fase ascendente de la burbuja todo era poco para tan gran momento, y en plena recesión cualquier gasto es negociable.

La cifra de 2005 supuso un máximo. Dos años antes, en 2003, el casamiento medio costaba 21.500 euros a la mayoría de la gente. Pero no a todo el mundo, claro está. En 2002 había tenido lugar una boda en la que solamente el apartado de iluminación costo 32.452 euros. Más de cinco millones de pesetas. Esa es la cifra que consta en los documentos de la trama Gürtel que se acaban de revelar, correspondientes a servicios prestados y no cobrados en la fiesta que siguió al enlace de la hija de José María Aznar con Alejandro Agag. 32.452 euros solo en iluminación. Detallemos: 18.000 en los arefactos iluminadores propiamente dichos, y sus reguladores. 9.000 en generadores eléctricos, porque si enchufas 18.000 euros de bombillas a la toma del patio saltan los plomos. Más de mil en alojamiento de los técnicos. Y cantidades menores en otros gastos asociados. Total: 32.452 (con 42 céntimos), un 50% más de lo que costaba la totalidad de una boda media en aquellos años.

Alejando Agag ha manifestado que "El regalo que el Sr. Correa hizo al Sr. Agag por su matrimonio fue exclusivamente el montaje de la iluminación de la celebración posterior a la boda. Este era un servicio habitual que el Sr. Correa prestaba en esa época con su agencia de eventos". Dicho así, parece poca cosa. "Mi primo el de las fiestas pone los focos y el generador, mi cuñado trae su equipo de música, la peña de la bolera van a cantar unas rancheras, y el vídeo lo hace Paquito, que está el primero de audiovisuales". Los amigos son esenciales para rebajar la factura de los fastos matrimoniales. Y las cantidades, desde luego, son variables: no es lo mismo poner unos focos de obra en la era para que bailen cien, que preparar un gran jardín para que bailen más de mil. Pero aún así: con 32.452 euros se ilumina el campo de aterrizaje de Encuentros en la Tercera Fase.