Ya, ya, sí, tenéis razón los protestantes. Y es verdad que estos de la Xunta largan a tutiplé lo de la liberté, fraternité y austerité, pero para escaquearse de la última le echan más cuento que Calleja. Ahí tenéis por ejemplo lo de los sueldos de lo alcaldes, que manda caralho; sí, lo de los 34.000 de vellón al año, o sea, casi tres veces más de lo que cobran los mileuristas y más de ocho que los parados de larga duración. De ahí que hoy, todos prefieran un político en la familia a un ingeniero aeronáutico. Jo.

El pájaro cuenta, acerca de esa cuestión, una historia muy verosímil, aunque le faltan aún varios certificados de origen. Resulta, según el relato, que en el montepío existirían opiniones diversas -y enfrentadas- sobre el ansia retributiva de los cargos municipales, pero desde la Federasao -versión actualizada, ampliada y herculina del antiguo sindicato de alcaldes boinero- mandaron un aviso escueto. "O botín o motín", decía, en la versión más reducida de las varias que circulan. ¿Capisci..?

(A ver: no hace falta que los renovados oráculos xunteiros hagan gestos indignados contra el pajarillo cantor, caramba. Todo el mundo sabe -incluso allí, a pesar de lo alejados que están de la realidad: solo la pulsan por vía telefónica o neotecnológica, que manda caralho: por eso hay quien casi no se entera de lo que pasa- que en el municipalismo de la banda de estribor hay una calentura tal que sus poncios hacen el churrasco directamente en la boca. )

Otra cosa. Dice Anacleto que bastantes Aymerichanos, ahora que ya se han quedado huérfanos, podrían solicitar el ingreso en las filas del beirismo, de la mano de antiguos amigos que están ahora ahí. Lo que aún no se ha confirmado es si les van a pedir un compromiso por escrito en el que renuncien a formar corrientes -en lo que son expertos- no vaya a ser que se resfríe el cuerpo en el que quieren ingresar. En todo caso, si se produce la migración, otros les imitarían, con el riesgo de que el Bloque se quede en un simple ladrillo. Uf.