Los goces de (casa) Paulina

¡Vaya cocido ese con el que agasajó los sentidos el limiano Julio Novoa en su Casa Paulina y vaya tinto de Ribadavia acompañante! Era jueves y se sentó a un lado de la mesa esa memoria de Vigo que es Paco Tizón; al otro, Eugenio Martínez, excapitán de Pescanova y Sea Harvest Co. en South Africa, donde residió, casó, conoció y apoyó a Nelson Mandela; en medio, el constructor y promotor Alfonso Ventoso, el promotor musical Bibiano Morón, el serio pero amable Hilario Sanmarfull de Pescanova, el bienhumorado y juvenil agitador Julio Alonso (ex Pescanova), el hostelero y pendón del Cristo Jesús Martínez "Choles" y, claro, Emily Boullosa. Disfrutaban en la mesa próxima del galaico condumio Félix Carnero, "ojo de lince" exdirector celtista, Sindo Rivera y Manolo Cividanes y, al final, una y otra mesa coincidieron en un cántico de alabanza al noble mesonero, que ha sabido unir cocina popular, agilidad y espacio de amistosa tertulia. A "Choles" le pidieron un corrido mexicano e interpretó una pieza nueva (ya era hora), y Julio Alonso clausuró el convite con un canto de amor a Vigo.

Y entonamos un alalá

Antes de la comida se hizo una rogativa en el bar Alalá de la calle Dr. Carracido 105, donde se tomó como aperitivo lo que Ana Viéitez nos mandó de la cocina y donde Jose nos puso un vino de Arbo de muy buena factura. En el Alalá apuestan por los vinos propios bancos y tintos del Condado, y apuestan con muy buen juicio según dicen los que saben. Allí se compartió mesa con el salvaterrense radicado en Vigo Antonio Martínez Otero y allí me encontré al exconcejal José Manuel Castedo, que tantos recuerdos trajo de aquellos años de la Transición en que estaba en el MCG y en que con tanta voluntad, tino y liderazgo trabajó en el movimiento vecinal vigués. Y, de colofón, se entonó un alalá.

El Grito Rock Mundo

¿Imaginas -me decía Rita Bouvy Vilaboa- un mundo donde sus ciudadanos se uniesen para trabajar colaborativamente (sin cobrar) en pro de un proyecto por un bien común (ej., la cultura)? Es posible? Rita cree que es posible y me ponía como ejemplo los festivales alternativos celebrados en Vigo y Nigrán el último fin de semana de febrero. Vigo, Nigrán y Madrid se unieron al tiempo a 300 ciudades de 30 países en el mayor festival colaborativo de artes integradas, denominado GRITO ROCK MUNDO! Nos escribe Rita que es un grito colectivo que defiende la cultura libre, diversa, promoviendo la producción colaborativa de modo abierto y participativo para evitar la homogeneización del libre mercado. Además teje una Red Global de Música y Artes que no deja de crecer como alternativa al modelo actual. Así, en Galicia, capitaneado por ciudadanos y colectivos locales, en las redes y en las calles, se articularon espacios y colectivos culturales variopintos. Además, en Nigrán, con la Casa Colorida se ha aumentado el espacio para la acción cultural independiente de la zona. Ésta es sólo la primera acción conjunta de un futuro Movimiento Social de la Cultura.