Estos días la figura de Alcalá- Zamora ocupa parte importante de los titulares de prensa, gracias a la recuperación de unos documentos suyos de gran relevancia histórica sustraídos en plena guerra civil. La historia de esta sustracción nos la cuenta el propio don Niceto en sus Memorias redactadas en el exilio: "Cuando el 6 de julio de 1936 para realizar el viaje proyectado hacía mucho tiempo que consistía en un crucero por los mares árticos, sentimos ante la anarquía imperante y las violencias que el Gobierno excitaba contra mí, el temor de dejar las Memorias en nuestra casa... Preferimos como solución más segura dejar las Memorias en la agencia madrileña del Crédit Lyonnais, banco extranjero del que yo había sido abogado desde 1915 a 1930.... El 13 de febrero de 1937 los sabuesos de Galarza encontraban las Memorias al dar con las cajas alquiladas por mi mujer en el Crédit Lyonnais... La última y vana pista que tengo al escribir estas líneas, el 8 de marzo de 1940, es que mis Memorias, después de arrebatadas y de rodar de mano en mano, fueron a parar a las juventudes socialistas, y aún me puntualizaron que de ello debía tener la clave