Orlando Ortega fue el protagonista del día al conseguir una merecida medalla en 110 metros vallas,la primera de España desde Atenas 2004. Lo hizo en una carrera que no se recordará por su excelencia pero sí por su oficio, sobre todo en el tramo final. Su salida no fue buena y eso condicionó toda su carrera. No es un atleta explosivo pero sí con una enorme fuerza reactiva y potencia aneróbica que lo lleva a crecerse a medida que la carrera va trascurriendo. Nacido y formado en Cuba bebe de esa escuela en sus características técnicas. A la séptima valla llegó primero McLeod, que encabezó la prueba desde el primer metro. En esa valla estaban 5 atletas en posición de pelear la plata (Martinot- Lagarde, Bascou, Ash, Allen y Ortega). Ninguno de los rivales de Ortega en la lucha por la plata fue capaz de mantener ese ritmo endiablado entre vallas del español y se hizo con la plata. El norteamericano Ash acabó en el suelo después de un tropezón en la última valla. Allen y Martinot Lagarde no aguantaban el ritmo y Bascou se hacía con el bronce. McLeod realizó 13.05 y Ortega 13.17, los separaron 12 centésimas, las mismas que separaron a los dos primeros en Londres.

España consiguió su primer medal en esta disciplina en toda la historia, Francia es la primera en 40 años, Jamaica obtiene su primer oro pero lleva dos Juegos consecutivos logrando medalla. EE.UU., la gran potencia mundial en vallas, se quedó sin medalla. A los vallistas norteamericanos le ha pasado lo mismo que a las vallistas, de ese país el año pasado en el Campeonato del Mundo.

Es la primera vez en la historia olímpica que EE.UU queda sin ninguna medalla en la prueba de 110 metros vallas, con la única excepción de Moscú 1980 por el boicot norteamericano a los Juegos en plena Guerra Fría. Siempre que han estado presentes han conseguido subirse al podio. Buena parte de sus mejores hombres están viendo los Juegos por televisión al caer eliminados en los USA Trials, como Richardson, Merritt y Oliver (lesionado semifinales), entre otros.

Sergio Fernández fue el otro gran protagonista español al batir el récord más antiguo de la tabla de récords nacionales. Su registro final de 48.87 borra a Alonso Valero (49.00). Es un atleta que destaca por su técnica, es muy bueno con ambas piernas en el paso de valla y por su potencia, es capaz de ir a 13 apoyos, entre vallas, hasta la séptima y luego pasa a 14 hasta el final.

Faith Kipyegon destronó a Genzebe Dibaba, la otra gran favorita en el 1.500. La carrera fue un calco de lo que aconteció en Pekín 2015 pero a la cita carioca llegó mejor la keniana. Su último 800 fue en 1:57.8 (En Pekín Genzebe hizo 1:57.2). Simpson se hizo con el bronce y demostró que EE.UU. está haciendo muy bien las cosas en medio fondo y fondo, distancias en las que siempre dominan los africanos. Ella se suma a la medalla de Murphy en 800 y Jager en los 3.000 obstáculos, lo que demuestra la buena actuación general de sus milleros y fondistas.

Drouin hizo los seis primeros intentos en altura sin ningún tipo de nulo y eso le valió el oro con un salto de 2.38. Drouin destaca por su técnica. La inmensa mayoría de saltadores buscan entrar lo más rápido posible a la batida, Drouin prefiere entrar más lento que el resto pero lo hace de una manera más controlada y con la pierna totalmente rígida a la hora de batir. Tampoco arquea tanto sobre el listón, como otros saltadores pero su técnica roza la perfección. El canadiense consiguió el primer oro para su país desde 1996.

En el 10.000 femenino vivimos un traspaso de poderes entre Tirunesh Dibaba y Ayana; en 100, entre Fraser-Pryce y Thompson; y en los 3.000 obstáculos asistimos a otro traspaso de poderes entre Ezekiel Kemboi, el gran dominador de la especialidad, y Conseslus Kipruto, el nuevo monarca de la disciplina en todos estos casos, hay relevo generacional en estos países. Kipruto era técnicamente el peor de los contendientes al oro, solo pasa los obstáculos con una pierna y cuando le toca saltar con la otra tiene que recortar para saltar con la buena, pero ha sido el mejor durante toda la temporada. Ezekiel Kemboi -que llegó a la meta tercero pero fue luego descalificado por pisar fuera de la cuerda- anunció tras la final que deja el atletismo. Se marcha con dos títulos olímpicos y 7 medallas en Campeonatos del Mundo (4 oros y tres platas). Nunca ostentó el récord del mundo pero se marcha, después de 18 años, uno de los mejores obstaculistas de todos los tiempos.

Una de las sorpresa de los Juegos fue la eliminación de Pawel Fajek en la calificación de martillo y el desastre keniano en 5.000. Ninguno de sus tres representantes estarán en la final. Por contra, estará Bernard Lagat, keniano de nacimiento pero estadounidense de adopción, que consiguió acceder a la final, a pesar de contar con 41 años. De los seis componentes del 5,000 y 10.000, solo Paul Tanui (plata en 10.000) ha tenido una buena actuación.

*Director Técnico de la Federación Gallega de Atletismo