La palista canguesa Teresa Portela afirmó que hoy tratará de ir "a por todas" y optar a las medallas en la final de piragüismo K1 200 metros de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

Tras la semifinal, Portela dijo que hace un mes "era muy prudente" en sus objetivos, pero ahora que está en la final, va "a por ello".

"La verdad es que estoy muy contenta. El objetivo de hoy (por ayer) era la semifinal y me la tomé como si fuera una final y estoy muy contenta con la regata", explica. Las sensaciones fueron buenas y eso es una gran señal. "Me encontré muy bien y ahora hay que hacer borrón y cuenta nueva, estar centrada para la final y estoy muy satisfecha de poder estar en otra final olímpica", indica.

Su pensamiento, nada más salir del agua, fue para su hija Naira y para su marido David Mascato, que finalmente no pudieron acompañarla a Río. "Nada más salir del agua ya llamé a casa para hablar con David (Mascato) y con Naira y desde aquí quiero mandarles un besito muy grande para ellos", dice la palista, que volvió a la alta competición después de su maternidad.

En su primera regata del día, Teresa Portela se limitó a comprobar sus sensaciones, calibrando en todo momento sus esfuerzos. "En la eliminatoria era importante entrar en competición. Siempre al principio cuesta un poco más, pero bueno, tampoco lo hice a tope. Sabía que una hora después era la semifinal y para mí esa era la primera final de estos Juegos y de alguna manera en la primera eliminatoria no me exprimí al máximo para encontrarme muscularmente bien para la semifinal", confiesa. En esa eliminatoria se clasificó con el tercer mejor tiempo de su serie.

Poco después tuvo que volver al agua para ganarse el billete para la final de hoy. "Hubo simplemente una hora de diferencia y bueno, en la semifinal, la referencia era la neozelandesa Lisa Carrington. Sabía que cuanto más cerca estuviera de ella, mejor", comenta

De todos modos, Portela advierte de la gran igualdad que hay entre las finalistas: "La neozelandesa es la gran favorita pero también están muy bien Osypenko y la polaca, pero realmente veo que estamos todas en un puño y puede pasar cualquier cosa. Yo quiero estar centrada, pendiente de lo mío, de mi carrera, sin pensar en nadie más, simplemente hacer lo mío".

"Voy a intentar dar lo mejor de mí. Voy a hacer mi competición, pensar que es otra final olímpica. Estoy aquí después de tantos años entrenando para quedar contenta, satisfecha, así que a por ellas". Teresa Portela está lista para la gran batalla.