La sesión de entrenamientos de saltos de trampolín en la piscina Maria Lenk de Río fue cancelada durante la jornada de ayer "para restablecer el estado del agua", manifestó el portavoz del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Río, Mario Andrada.

"Hay que limpiar más rápido", añadió. Andrada insistió en su mensaje de días previos de que "no hay peligro alguno" para los nadadores, aunque "uno o dos" se han quejado de picor en los ojos.

"Eso fue porque, cuando el agua viró a verde, se usó una mayor cantidad de cloro. Pero luego se redujo", indicó. Andrada dijo que los saltadores "pueden entrenar en otro lugar, aunque no sea lo ideal".

"Pero restablecer el estado del agua es la prioridad", apuntó el portavoz de la organización. En la sesión vespertina se disputarán las eliminatorias femeninas de trampolín de 3 metros.