Los primeros Juegos Olímpicos celebrados en un país de América del Sur nos van dejando estampas que no podrían producirse en ningún otro lugar del mundo. Si hace poco nos ha sorprendido el color de la piscina utilizada para los saltos de trampolín, la biodiversidad de Brasil ha vuelto a mostrarse poco después en el campo de golf.

Algunos de los golfistas participantes en Río han compartido en las redes sociales la sorpresa que han vivido al ver cómo unos habitantes de las aguas pantanosas que circundan el campo olímpico campan a sus anchas por el lugar. Son las capibaras, los roedores más grandes del mundo.

El ´tuit´ recoge la exclamación de asombro del golfista español Sergio García y el austriaco Bernd Wiesberger al cruzarse por primera vez con una de estas capibaras, "What on earth are they?". Expresión que se podría traducir como "¿Qué demonios son?".

Los capibaras son roedores que tienen como hogar las zonas húmedas de Sudámerica. Es por ello que el campo de golf, con sus estanques, es un entorno idóneo para estos animales.