La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) denunció ayer que sus inspectores no han podido acceder todavía a la localidad siria de Duma por "cuestiones de seguridad", alegadas por Rusia y Siria, a la vez que anunció que las autoridades de ese país ofrecen mientras tanto entrevistas con 22 testigos de lo ocurrido, pero desde Damasco. El viceministro de Exteriores ruso, Sergei Riabkov, explicó que lo que dificulta el acceso a Duma de la misión de la OPAQ son las consecuencias del ataque tripartito y atribuyó el retraso a la falta del visto bueno por parte del departamento de seguridad de la Secretaría de la ONU.