El caótico retrato de la Administración Trump dibujado por el periodista Michael Wolff en su libro "Fuego y furia" sigue levantando ampollas en la Casa Blanca, cuyo inquilino, Donald Trump, no dudó en responder ayer a las acusaciones de "incapacidad mental" proclamando que es "un genio".

El libro, cuya publicación ha intentado vetar sin éxito el magnate, iba a ser puesto a la venta el próximo martes, pero la polémica que lo convirtió en un superventas, gracias a las reservas, antes de llegar a las librerías aconsejó adelantar a la medianoche del pasado viernes su salida al mercado. La reputada librería de Washington KramerBooks se quedó sin ejemplares en solo una hora y el libro ya encabeza las listas de ventas en Amazon.

"He pasado de hombre de negocios de mucho éxito a estrella de la televisión y a presidente de Estados Unidos (en mi primer intento). Creo que eso me acredita no solo como alguien listo, sino como un genio... ¡Y un genio muy estable, además!", escribió Trump en uno de sus característicos tuits.

El libro de Wolff describe a Trump como un dirigente absolutamente incapaz de tomar una decisión pragmática y como una persona "carente de los elementos más básicos para relacionar causa y efecto". El propio autor ha declarado a la cadena NBC que "el cien por cien" de las personas con las que ha hablado creen que Trump es "como un niño". De ahí que el magnate, sobre cuya salud mental han emitido dudas relevantes psiquiatras estadounidenses, que lo consideran víctima de un trastorno narcisista de la personalidad, insista en que es un modelo de cordura.

"Los dos activos más grandes que he tenido en mi vida han sido mi estabilidad mental y que soy realmente inteligente", escribió en otro tuit el presidente de EE UU, quien recordó que en la campaña presidencial su rival demócrata Hillary Clinton, a la que aludió como "la corrupta", "ya intentó jugar esas cartas" y, "como todo el mundo sabe, se cayó con todo el equipo".

Si Trump no calla, Wolff, cuya carrera periodística arroja algunas sombras notables sobre su rigor, tampoco lo hace. El autor de "Fuego y furia", que ha sido acusado de reproducir el contenido de unas 200 entrevistas sin haber entrado en más comprobaciones, se mostró ayer convencido de que sus revelaciones acabarán desembocando en el final anticipado de la presidencia del magnate.

Pese a las críticas de inexactitud que le han llovido desde determinados sectores, Wolff aseguró ayer que la idea más importante de su libro, esto es, que Donald Trump está incapacitado para ser presidente de Estados Unidos, está lo suficiementemente cimentada. "Está bastante claro que hay un efecto muy claro de que 'el emperador está desnudo'", declaró a BBC Radio en una entrevista emitida ayer.

"La historia que he contado describe esta presidencia de tal forma que deja clara la impresión de que este hombre no puede hacer su trabajo. Y, de repente, todo el mundo se ha puesto en plan 'Oh, Dios mío, es verdad'. Ese es el fondo del asunto: la percepción y la comprensión de que este factor (la incapacidad) acabará con esta presidencia".