Reacciones para todos los gustos, pero en una sola dirección: crítica con el la decisión de Trump. Antes incluso de anunciarse, el Papa no ocultó su preocupación. "Mi pensamiento va a Jerusalén. No puedo callar mi profunda preocupación por la situación", dijo el pontífice, que pidió que se respete "el 'status quo' de la ciudad, conforme a las pertinentes resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas".

"Hemos recibido con gran preocupación el anuncio irresponsable del Gobierno estadounidense de que reconoce Jerusalén como capital de Israel y que trasladará su embajada a Jerusalén, y lo condenamos", escribió en Twitter el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlüt Çavusoglu. La UE se declaró "gravemente preocupada" por las "repercusiones" de la decisión, que el presidente francés, Emmanuel Macron, tachó de "desafortunada".