Sin aún tiempo para recuperarse de la experiencia traumática del devastador huracán Irma, el Caribe se prepara para encajar la acometida del huracán de categoría mayor María, mientras Florida cruza los dedos para escapar a su golpe.

María, a punto de azotar las Antillas Menores, alcanza ya la categoría 4 en la escala de intensidad Saffir-Simpson, de un máximo de 5, con vientos sostenidos de 215 kilómetros por hora.

La tormenta se encuentra a unos 50 kilómetros de la isla de Martinica y se espera que afecte directamente también a las islas Leeward y a las islas Vírgenes, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).

El recorrido probablemente llevará a 'María' a última hora del martes hasta Puerto Rico, territorio sobre el que pesa una alerta de huracán porque se trata de "una tormenta capaz de poner en peligro vidas humanas" con intenso oleaje, subidas repentinas del nivel del mar, deslaves e intensas lluvias.

Las poblaciones de las Antillas Menores aún se encuentran bajo el shock causado por el paso del huracán Irma, de categoría 5, que dejó al menos 26 muertos en el Caribe y dañó entre el 60 y 80 % de los edificios en muchos de los territorios de las Islas Vírgenes británicas y estadounidenses, así como en Antigua y Barbuda.

El caso más dramático es el de la pequeña isla de Barbuda, en el este del Caribe, con una población de unos 1.600 habitantes, que ha sido declarada inhabitable.

En estos momentos, la práctica totalidad de las islas de las Antillas Menores se hallan bajo aviso de huracán, entre otras Guadalupe, Dominica, San Cristóbal y Nieves, Montserrat y Santa Lucía, así como las Islas Vírgenes estadounidenses y británicas

Por el momento se desconoce si María llegará a tocar tierra en Estados Unidos, pero el cono de proyección de su trayectoria en la mayor parte de los modelos por computadora sitúan su radio de acción fuera de la península floridana.

Pese a que el 90 % de los usuarios de Florida ha recuperado ya el suministro eléctrico una semana después del paso del huracán Irma por el estado, miles de hogares, oficinas o negocios permanecen todavía sin luz ni aire acondicionado.

Por condados, el de Miami-Dade, el más poblado de Florida, contabiliza hoy todavía 52.290 usuarios sin electricidad, de un total de 1.114.000 clientes, y en el condado de Broward, vecino de Miami-Dade, 12.990 usuarios permanecen sin fluido eléctrico, de un total de 933.300 abonados de la compañía Florida Power & Light (FPL) en ese área.

En cuanto a los residentes en la costa oeste del estado, por donde Irma entró el pasado día 10 de septiembre al territorio continental de EE.UU., el condado de Collier, uno de los más castigados por Irma, contabiliza 58.660 clientes sin luz, de un total de 210.700.

Y en el condado de Lee, también en la costa suroeste, quedan 48.920 usuarios sin luz, de un total de 259.900 clientes.

El expresidente Bill Clinton (1993-2001) visitó el pasado domingo un refugio general habilitado en los terrenos del Tamiami Park, en Miami, que todavía alberga a 700 evacuados de los Cayos de Florida y de Miami por el paso del huracán Irma.

En la visita a este refugio, Clinton estuvo acompañado por el alcalde del condado de Miami-Dade, Carlos Giménez, según recogió el diario El Nuevo Herald.

Las autoridades condales trasladaron a centenares de refugiados a los terrenos del Tamiami Park tras cerrar los otros 41 refugios que permanecían abiertos desde antes de la llegada del devastador huracán.

La cifra provisional de muertes relacionadas con el paso del huracán Irma por el sureste de EE.UU. (Florida, Georgia y Carolina del Sur) asciende por lo menos a 39, sin que se conozca el balance final de daños y pérdidas materiales, que tardará meses en determinarse.