La Guardia Nacional Bolivariana, custodio del Palacio Federal Legislativo venezolano, impidió hoy la entrada de los diputados opositores a la Cámara, después de que los oficialistas constituyentes entraran por la fuerza para tomar el control de la sede, hasta ahora controlada por el antichavismo.

"No nos dejan pasar al Palacio Federal Legislativo. Este gobierno invade los espacios que ya no son capaces de ganar legítimamente", denunció el diputado Stalin González, jefe de la mayoritaria facción opositora, que representa dos terceras partes de los escaños de la Asamblea Nacional.

La Asamblea Nacional Constituyente, electa hace poco más de una semana en una controvertida elección que registró casi la mitad de votos de los que eligió al Parlamento ordinario, ha tomado el control de la sede legislativa fundamentado en la facultad de tener poderes plenipotenciarios e incuestionables por autoridad alguna.

Los parlamentarios opositores, que pretendían celebrar una sesión hoy sobre la crisis venezolana, han asegurado que los militares y grupos de civiles violentos vinculados al Gobierno, conocidos como "colectivos" les impidieron el paso y les obligaron a abandonar el lugar.

"Ellos actúan como el hampa, ellos llegaron en la noche, en la oscuridad y tomaron el Palacio", dijo a periodistas el diputado Jorge Millan refiriéndose a la toma de una de las Cámaras del hemiciclo que era usada por el Parlamento por parte del jefe militar de la seguridad, el coronel Bladimir Lugo.

"Nosotros nos presentamos hoy, pero fue imposible el acceso por las condiciones que estaban alrededor de la entrada del Palacio Federal", reiteró Millán. No obstante, indicó que mañana los diputados debatirán en la Asamblea Nacional, "defendiendo el mandato" para el que fueron electos por una amplia mayoría de votantes.

El constituyente Diosdado Cabello había advertido en público que la Asamblea Constituyente tendría la tutela del Palacio Federal Legislativo y que por tanto se requeriría de su autorización para cualquier actividad. Hasta ahora ambas Asambleas habían convivido en el mismo Palacio, con los oficialistas instalados en el ala norte, y los opositores con el ala sur de la sede.