La explosión de tres coches bomba en Damasco provocó ayer al menos 21 muertos. Entre las víctimas están los tres terroristas suicidas que conducían los vehículos y siete miembros de las fuerzas gubernamentales sirias, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Tanto la televisión como la agencia de noticias oficiales sirias informaron ayer de que dos de los coches bomba fueron detonados de forma controlada por las fuerzas de seguridad, tras interceptar a los conductores suicidas, en la carretera que une el aeropuerto con la capital. El Ministerio de Interior asegura que los vehículos se dirigían hacia los barrios "seguros" de Damasco y fueron detenidos para impedir que llegaran a sus objetivos.

El tercer coche bomba consiguió alcanzar la plaza Al Gadir, en el barrio histórico de la capital, y su explosión causó el mayor número de víctimas.

Ningún grupo reivindicó ayer el atentado en la capital siria, que ya fue antes escenario de ataques terroristas por parte de grupos radicales, como el yihadista Estado IsIámico (EI). Ese grupo, que controla amplios territorios en Siria, asumió la autoría de los últimos grandes atentados en Damasco a mediados de marzo, cuando dos suicidas atacaron de forma casi simultánea el Palacio de Justicia y un restaurante frecuentado por representantes gubernamentales y causaron una treintena de muertos.

La alianza armada liderada por las milicias kurdas Fuerzas de Siria Democrática (FSD) tomó ayer la localidad de Kasra, al sureste de la ciudad de Al Raqa, feudo del Estado Islámico en Siria. En el ataque mataron a decenas de yihadistas. Las fuerzas del FSD liberaron el mercado de Al Hal, en el este de Al Raqa y otros edificios estratégicos en el interior de la ciudad, según un comunicado de la alianza armada. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirma la toma del mercado aunque apunta a que se produjeron bajas en ambos bandos.

Las FSD están recuperando terreno y avanzando frente a sus enemigos, después de conseguir reconquistar parte del estratégico barrio de Al Siná, en el este de Al Raqa, tras haberlo perdido el día anterior por completo, según el Observatorio. Las milicias enviaron refuerzos militares a los frentes oeste y este de Al Raqa, según anunciaron en una de sus cuentas de Telegram, con el objetivo de seguir presionando a sus enemigos por esos dos ejes.