El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó ayer prolongar la pausa humanitaria en la ciudad siria de Alepo durante 24 horas, anunció el ministro de Defensa, Serguei Shoigu. Mientras, las autoridades sirias anunciaron la salida de combatientes del este de la ciudad, sitiado por el Ejército y en poder de la oposición, durante la jornada de pausa humanitaria, lo que fue negado por activistas. Rusia había ofrecido a la ONU que la pausa fuera de 11 horas diarias durante cuatro días.