La Corte Penal Internacional (CPI) condenó ayer a nueve años de prisión al yihadista Ahmad Al Mahdi Al Faqi, alias "Abu Turab", por la destrucción de bienes patrimonio de la Humanidad en Tombuctú (Mali). La condena tuvo en cuenta hasta cinco circunstancias atenuantes, incluida la admisión de culpabilidad de Al Mahdi.