La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, advirtió ayer en la BBC que el Parlamento de Holyrood podría tener "el poder constitucional" de vetar la salida de Reino Unido de la UE y se declaró "dispuesta a usarlo".

"Si el Parlamento de Escocia juzgara este tema desde la perspectiva de lo que sería mejor para Escocia y sentenciara que no va a votar algo que esté en contra de los intereses del país, por supuesto que es una opción que está sobre la mesa", dijo Sturgeon.

La Cámara de los Lores británica consideró recientemente que el consentimiento del Parlamento escocés podría ser "imprescindible" para solucionar la tramitación de la salida de la UE en virtud de los acuerdos entre el Reino Unido y el bloque comunitario que afectan a los escoceses.

El 60%, con la secesión

De hecho, cerca del 60% de los escoceses apoyan la independencia de Escocia, según una encuesta publicada tras el referéndum del "Brexit". El sondeo del diario "The Sunday Post" muestra que el 59% de los encuestados apoyaría una salida de Escocia del Reino Unido, un dato superior al 45% de apoyos que cosechó esta opción en la consulta soberanista de septiembre de 2014. En el referéndum del "Brexit", el pasado jueves, el 62% de los escoceses se decantó por la permanencia, que un 52% de los británicos en su conjunto rechazó.

La primera ministra escocesa anunció el sábado su intención de aprobar la legislación necesaria para convocar una nueva consulta independentista. Uno de los argumentos más usados en 2014 por los partidarios escoceses de permanecer en el Reino Unido es que la secesión implicaría la salida del bloque comunitario.

Sturgeon también anunció el sábado que pedirá entrevistarse con los líderes de las instituciones europeas y los dirigentes de otros estados miembros para "proteger el lugar de Escocia en la Unión Europea".

A pesar de la amenaza de Sturgeon, el diputado conservador escocés Adam Tomkins, experto en Derecho constitucional, afirmó que el Parlamento escocés no está capacitado para vetar el "Brexit". Tomkins explicó que el Parlamento de Holyrood "tiene poder para demostrar su consentimiento o guardar silencio. No es lo mismo que vetar".