El jefe negociador de la oposición siria en las conversaciones de paz de Ginebra, Mohamed Alush, presentó ayer su dimisión por considerar que la comunidad internacional ha fracasado en obtener progresos sobre el terreno y una solución política al conflicto en Siria. La dimisión fue aplaudida por Rusia, principal aliado del régimen de Damasco.

Alush denunció "la incapacidad" de la comunidad internacional para poner fin al asedio de las ciudades (por parte del Ejército sirio) y conseguir la liberación de los presos de guerra, así como la incapacidad de la ONU para elaborar un calendario negociador.