El grupo chií libanés Hezbola responsabilizó ayer a grupos armados radicales de la muerte de su líder militar, Mustafa Badredín, que falleció en Siria, donde la milicia apoya al régimen del presidente Bachar al Asad. "La explosión que llevó a la muerte de Badredín fue causada por un bombardeo de artillería de los grupos takfiríes (islamistas radicales)", aseguró el grupo libanés en un comunicado.

Hezbola anunció el viernes que Badredín, alias "Zu al Fiqar", perdió la vida en una "fuerte explosión" en una de las bases de la milicia cerca del aeropuerto internacional de Damasco, en un bombardeo que fue atribuido en un primer momento a Israel.

Asimismo, el grupo aseguró que estaba investigando lo sucedido y que revelaría en unas horas quién estaba detrás de la muerte del que estaba considerado como su jefe de operaciones en Siria. "La investigación en la muerte de Badredín va a aumentar nuestra determinación a seguir en la lucha contra las bandas criminales" en Siria, destacó Hezbola en la nota. "Esta es una única batalla contra el proyecto sionista-estadounidense, cuya punta de lanza ahora mismo son los terroristas takfiríes", añadió la milicia chií libanesa.