La canciller alemana, Angela Merkel, visitó ayer un campamento de refugiados sirios en la provincia meridional turca de Gaziantep, como parte de su programa para conocer de primera mano la situación en el país, en el marco del acuerdo de deportación de emigrantes desde Europa.

Merkel fue recibida por el primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu. La comitiva se desplazó a Nizip, una ciudad de unos 100.000 habitantes, en cuyas inmediaciones se hallan dos campamentos de refugiados sirios. El campamento es un recinto con 938 casas prefabricadas cerca del río Éufrates, que alberga a unos 4.800 refugiados sirios. En Gaziantep la canciller inauguró un centro destinado a niños y familias de refugiados y construido con fondos europeos. La UE destina 6.000 millones de euros a cambio de que Turquía acepte la deportación de todos los refugiados que llegaron a las islas griegas desde el 20 de marzo pasado.