El Kremlin calificó de "humor británico" la conclusión de la investigación de Londres que considera que el asesinato del exespía Alexander Litvinenko fue "probablemente" aprobado por el presidente de Rusia, Vladímir Putin.

"En general esto se puede achacar a ese humor británico tan refinado", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, quien advirtió que este informe "envenenará aun más la atmósfera de nuestras relaciones bilaterales".

Para Peskov el proceso parece una broma "por el hecho de que una investigación pública y abierta se base en datos secretos de unos servicios de inteligencia que no se nombran, y porque el veredicto, que se sostiene en esas informaciones efímeras, emplea con asiduidad palabras como posiblemente y probablemente".

Esta terminología, subrayó, "no se tolera en nuestra práctica judicial ni en la de otros países, y obviamente no puede tomarse como un veredicto".

"Pseudoinvestigaciones como ésta, sin duda, no logran nada más que envenenar aun más la atmósfera de nuestras relaciones bilaterales", lamentó el portavoz de Putin, que según el informe difundido por Londres autorizó "probablemente" la operación para liquidar a Litvinenko.

Aseguró que Rusia "confiaba en una estrecha cooperación en la investigación de este caso, pero los británicos decidieron congelar no sólo la colaboración, sino también el diálogo en la aplastante mayoría de ámbitos".

Por otro lado, Peskov recordó que desde la muerte del exagente ruso en 2006, Moscú ha reiterado en un sinfín de ocasiones que los servicios de inteligencia rusos no tuvieron nada que ver con el crimen.

Por su parte, el embajador ruso en el Reino Unido, Alexander Yakovenko, calificó hoy de "absolutamente inaceptable" la conclusión de la investigación sobre la muerte de Alexander Litvinneko, que apunta a que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, "probablemente" aprobó el asesinato del exespía. Las autoridades rusas ya han avisado que esta acusación tendrá "consecuencias" para las relaciones bilaterales de ambos países.

Yakovenko hizo esta declaración tras reunirse hoy durante menos de una hora con el secretario de Estado para Europa, David Lidington, después de haber sido convocado por la ministra de Interior, Theresa May.

"El tiempo que ha llevado cerrar este caso nos hace creer que se trata de un encubrimiento de la incompetencia de los servicios especiales británicos", dijo el diplomático ruso a las puertas del ministerio de Exteriores británico.

Para Yakovenko, "la provocación repugnante de las autoridades británicas daña inevitablemente nuestras relaciones bilaterales".

Por su parte, el secretario de Estado para Europa, David Lidington, remarcó que "la probable implicación del Estado ruso en este asesinato ha sido profundamente perturbadora y demuestra un desprecio flagrante por la ley británica, la legislación internacional y los estándares de conducta, y la seguridad de los ciudadanos británicos".

Esos hallazgos, según advirtió el secretario de Estado en un comunicado, "complicarán más las relaciones bilaterales, socavarán la confianza y dañarán la reputación de Rusia a nivel internacional".

Durante la reunión en el Foreign Office, reiteró además su demanda a Rusia para que "coopere con la investigación criminal a fin de asegurar que los sospechosos puedan ser llevados ante la justicia y se enfrenten a un juicio en el Reino Unido".

Lidington hizo hincapié en que es "inaceptable que Rusia no haya cumplido con la petición formal de la Fiscalía para extraditar a (Andréi) Lugovói", principal sospechoso del asesinato de Litvinenko.

"La exigencia inmediata" que plantea Londres a Rusia es que "proporcione respuestas a las preguntas planteadas en este informe, que se responsabilice de las acciones de los servicios de inteligencia rusos en este caso y proporcione una garantía de que no se repetirá un crimen similar", concluyó.