Los refugiados que llegan a Suiza están obligados a entregar todos los bienes que superen el valor de 1.000 francos suizos (unos 915 euros) para sufragar los gastos de su estancia en el país, según ha revelado este jueves la televisión suiza SRF. La misma medida ha sido muy criticada en Dinamarca.

El programa '10 vor 10' de la SRF ha mostrado un recibo de un refugiado sirio que le fue entregado tras ser obligado a dar la mitad del dinero en efectivo que tenía su familia, lo que les quedaba tras pagar el pasaje a las mafias del tráfico de seres humanos para poder llegar al país alpino.

Además, ha aportado un documento informativo. "Si tiene propiedades de más de 1.000 francos suizos de valor al llegar al centro de recepción, debe entregar estos bienes y se le dará un recibo", explica.

"Es indigno", ha denunciado un activista del grupo de ayuda a los refugiados Schweizerische Fluechtlingshilfe. "Esto tiene que cambiar", ha apostillado.

La agencia estatal de inmigración, SEM, justifica esta medida alegando que la ley obliga a los solicitantes de asilo y refugiados a contribuir si es posible a costear el proceso de sus solicitudes y las ayudas sociales.

"Si alguien se marcha voluntariamente en siete meses, esta persona puede recuperar su dinero y llevárselo. De lo contrario, el dinero servirá para pagar los gastos que genere", ha apuntado un portavoz de la SEM en declaraciones a la SRF.

Además, a quienes se les conceda el permiso de residencia y trabajo, tendrán que entregar el 10 por ciento de su salario durante diez años hasta abonar 15.000 francos suizos, asegura el programa de la SRF.

En Dinamarca el Gobierno propuso una iniciativa similar, pero está siendo modificada por las autoridades tras las críticas de organismos como el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).