La Policía francesa mató al hombre armado que trató de atacar una comisaría del barrio de la Goutte d'Or, en el norte de París, un barrio con una fuerte presencia de población originaria del Magreb y del África negra.

Un papel con una bandera de la organización yihadista Estado Islámico (EI) y una reivindicación escrita en árabe han sido hallados en el cadáver del hombre abatido por la policía cuando presuntamente se disponía a atacar, armado con un cuchillo, una comisaría en el norte de París.

"Hoy a las 11.30 (10.30 GMT), un individuo, portador de un arma blanca de tipo carnicero y de un dispositivo explosivo falso, se presentó ante la comisaría del distrito XVIII, exhibió su arma y gritó 'allahu akbar' antes de ser abatido por los policías de guardia ante la comisaría", señaló la Fiscalía.

A esta persona, cuya identidad todavía se desconoce, se le encontraron un teléfono móvil y un papel en el que aparecía la bandera del EI y "una reivindicación manuscrita inequívoca en lengua árabe".

La investigación es llevada de forma conjunta por la sección antiterrorista de la brigada criminal de la prefectura de policía (SAT) y la dirección general de la seguridad interior (DGSI).

En una breve comparecencia ante los medios en el lugar de los hechos, el ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, dijo que, "en un país con un nivel de amenaza extremadamente elevado, las fuerzas del orden están plenamente movilizadas".

El cuerpo sin vida del individuo quedó tendido en el suelo a pocos metros de la puerta, donde fue inspeccionado en un primer momento por un robot de los artificieros, que temían la presencia de un artefacto de explosivos porque había unos cables que le colgaban por el interior de la chaqueta.

El atacante, que no llevaba documentos identificativos, utilizó para la agresión un arma blanca, que podría ser un utensilio de carnicería, según las fuentes.

Said, un vecino del barrio, contó a Efe que se escucharon al menos tres disparos y unos gritos. La policía acordonó todo el sector, con el despliegue de decenas de agentes uniformados y de paisano.

Brandet, que consideró que hubo "una reacción perfecta de los funcionarios de policía" que replicaron a tiros a la agresión, dijo no tener informaciones sobre la presencia de un segundo hombre en el ataque, de la que habían dado cuenta algunos medios de comunicación, aunque puntualizó que "no se puede descartar ninguna pista".

En cuanto a si había amenazas particulares por el hecho de que hoy se conmemora el primer aniversario del atentado yihadista contra el semanario satírico "Charlie Hebdo", el portavoz del Ministerio del Interior reconoció que "la amenaza es muy fuerte" y que "hay una vigilancia constante" por parte de los policías y los gendarmes.

Hollande señaló que la amenaza terrorista en Francia sigue siendo "temible", lo que justifica un reforzamiento del dispositivo antiterrorista, entre otras cosas con una evolución de las condiciones en las que policías y gendarmes pueden hacer uso de sus armas.