China dio ayer luz verde a la primera ley antiterrorista de su historia, que fue aprobada por el Legislativo a pesar de las fuertes críticas despertadas por el contenido de los borradores conocido previamente. Además, extendió la política del "segundo hijo" a todas las parejas del país y aprobó la primera ley de violencia doméstica.

La Asamblea Nacional Popular, el máximo órgano legislativo del país, dio su parabién a la norma antiterrorista después de acometer esta semana la tercera lectura de la propuesta de ley, que da amplios poderes al Gobierno e impone restricciones a la hora de informar sobre atentados.

El borrador ratificado por los legisladores incluye, además, una cláusula para permitir el envío de tropas chinas al extranjero para participar en misiones antiterroristas. Pero poco más se conoce de su contenido, ya que las autoridades se limitaron a anunciar la aprobación de la ley. Hasta ayer, China no tenía una legislación específica para luchar contra el terrorismo.

Países como Estados Unidos han mostrado públicamente su preocupación por esta ley antiterrorista y su presidente, Barack Obama, así se lo manifestó a su homólogo chino, Xi Jinping, en uno de sus últimos encuentros.

Uno de los motivos de inquietud es que el último borrador de la norma obligaba a las empresas tecnológicas locales y extranjeras a instalar "puertas traseras" en sus sistemas para permitir el acceso del Gobierno. Además, requería a las compañías con servidores y datos de usuarios en China facilitar a las autoridades los registros de sus informaciones, los códigos de encriptación y a censurar cualquier contenido vinculado al terrorismo.

Restricciones informativas

Otro apartado polémico de la ley es el relativo a las restricciones informativas, ya que el borrador estipulaba que las "instituciones o individuos no podrán generar ni divulgar información sobre incidentes terroristas" o "dar detalles que puedan incitar a la imitación".

La ley se aprueba un día después de que el Gobierno chino confirmara la expulsión de la periodista francesa Ursula Gauthier, corresponsal en Pekín de "Le Nouvel Observateur" (L'Obs), por un artículo sobre el terrorismo.

Exteriores acusó a la reportera de "defender actos terroristas" a raíz de ese reportaje, en el que se abordaba la respuesta de las autoridades chinas a los atentados de París de noviembre.

Por otro lado, el Legislativo chino extendió la política del "segundo hijo" a todas las parejas del país, tras ser aprobada una enmienda que permite tener dos descendientes y cierra más de tres décadas con la prohibición de alumbrar más de un vástago.

La histórica medida ya fue decidida y anunciada el pasado 29 de octubre, al término del plenario anual del Partido Comunista de China (PCCh), por lo que la ratificación parlamentaria era un trámite antes de su entrada en vigor, que se producirá el próximo 1 de enero de 2016.

Finalmente, la Asamblea Nacional Popular aprobó la primera ley de violencia doméstica del país, tras un largo proceso de deliberación en el que finalmente se incluyeron los abusos psicológicos, además de los físicos.