El chavismo inicia su agonía en Venezuela. Diecisiete años después de la primera victoria de Hugo Chávez, los venezolanos han entregado democráticamente y de manera contundente el poder legislativo a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la oposición al actual presidente, Nicolás Maduro. La MUD, con un 96% de los votos escrutados, ha conseguido 112 diputados en la Asamblea Nacional de Venezuela frente a 51 escaños a los que se ha quedado reducido el Partido Socialista Unido de Venezuela, la formación chavista. La oposición tiene en su poder los dos tercios del parlamento venezolano y comienza el derribo del legado chavista: ya se planean la revocación de Maduro.

La MUD obtuvo en las elecciones del domingo una ventaja de más de dos millones de votos con respecto al chavismo. La participación fue muy alta, del 79 por ciento, y los comicios se desarrollaron en paz, "pese a las presiones por parte del poder", indicaron los opositores al chavismo. La oposición se ha puesto inmediatamente manos a la obra. Además de la revocación del presidente, Nicolás Maduro, se preparan para aplicar una amnistía para los políticos encarcelados, como el caso de Leopoldo López. El opositor Henrique Capriles, actual gobernador del Estado de Miranda, exhortó al presidente Maduro a ponerse "a la orden" de la recién electa Asamblea Nacional. Capriles pidió también al mandatario venezolano que, como "un gesto", libere a los "presos políticos" encarcelados. Capriles aseguró que esta no será "la asamblea de la revancha", sino "de la justicia", porque la Cámara "clama por el orden. El país vive la peor crisis de su historia", añadió el político. Capriles pidió a los nuevos legisladores "humildad, madurez y mucha serenidad".

Esta mayoría permite a la plataforma opositora, en primer término, designar la junta directiva de la cámara, que tomará posesión el 5 de enero de 2016 y de la que nunca había formado parte. Entre otras, podría también aprobar una ley de amnistía que extinga la responsabilidad penal que pesa sobre varios opositores presos, entre ellos el líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, condenado a casi 14 años de prisión por la violencia de una marcha antigubernamental. Esa mayoría permite igualmente destituir a los magistrados, en el caso de que cometieran faltas graves que fueran calificadas previamente por el Poder Ciudadano (integrado por el fiscal, el defensor del pueblo y el contralor), y autorizar al Tribunal para enjuiciar al primer mandatario, en este caso, Maduro.

El aún presidente Maduro acepta los resultados adversos con la "moral y la ética del chavismo" y destacó que "ha triunfado la Constitución y la democracia". El presidente hizo estas declaraciones acompañado de los candidatos chavistas apenas segundos después de que la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) Tibisay Lucena, anunciara los resultados preliminares de las legislativas. No obstante, Maduro atribuyó su derrota a que triunfó la "guerra económica" que, según asegura, le hace la oposición y la empresa privada a su Gobierno para derrocarlo. Esa guerra, según Maduro, es la que está causando la escasez de productos básicos o infla sus precios desde hace un par de años. "Ha triunfado la guerra económica, ha triunfado una estrategia para vulnerar la confianza colectiva en un proyecto de país, ha triunfado circunstancialmente el estado de las necesidades creado por una política de capitalismo salvaje, de esconder los productos, de encarecerlos, es una guerra sin parangón, sin igual", señaló. A juicio del mandatario venezolano, esa guerra económica que se "recrudeció" la última semana antes de las elecciones "inhibió" a un porcentaje importante de votantes pro oficialistas "y viró las corrientes históricas". "Mundo, escúchennos, a Venezuela se le ha sometido a una guerra brutal y Venezuela hoy puede decir, a pesar de estos resultados adversos, circunstancialmente adversos para la revolución bolivariana, que Venezuela está aquí de pie y Venezuela en paz pudo canalizar por ahora este conflicto con el capitalismo salvaje", señaló. Maduro aseguró que, pese a este resultado adverso, el Gobierno que preside pondrá todo su esfuerzo en que se mantengan los programas sociales "y todo el trabajo de protección del pueblo". En este sentido, pidió a la oposición aglomerada en la Mesa de la Unidad Democrática que "administren muy bien ese triunfo que han obtenido" y que "ojalá puedan ponerse en sintonía con la necesidad de millones".

Las calles de Venezuela se llenaron de ciudadanos que celebraron la victoria de la oposición. Poco después de conocerse los primeros y esclarecedores resultados, el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, afirmó que esta victoria representa el "comienzo del cambio" en el país. Con esta victoria, añadió, "la agenda de la paz reinó, la agenda de los ciudadanos se impuso y el voto logró vencer democráticamente a un Gobierno que no es democrático", aseguró el portavoz de la alianza al dar lectura a un comunicado conjunto de la plataforma que agrupa a la mayoría de los partidos de oposición.

Torrealba consideró que los resultados envían un mensaje al Gobierno de Nicolás Maduro, porque demuestran que "el pueblo habló claro, las familias venezolanas se cansaron de vivir las consecuencias del fracaso, el pueblo no tolerará ni el más mínimo desvío de los principios establecidos en la Constitución".

Torrealba también se enorgulleció de que la MUD ha logrado vencer "al petro-Estado" que ha destinado "montañas de dinero" a esta campaña electoral. "Le dimos una lección a los corruptos, a los especuladores, a los saqueadores", ha destacado. El jefe de la coalición opositora ya había confiado durante la noche electoral en que la MUD llegara a los 113 escaños, apuntando a una "derrota estruendosa" del 'chavismo'.