El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, garantizó ayer que España "no le va a negar el derecho de asilo a nadie" y se declaró convencido de que el resto de los socios de la UE actuará de la misma forma. Así lo aseguró en presencia del primer ministro británico, David Cameron, con el que ofreció una rueda de prensa tras la reunión que ambos mantuvieron en la Moncloa.
El jefe del Ejecutivo recalcó que España cumplirá sus compromisos con la UE y, respecto al número de refugiados que podrían acoger España, pidió aguardar a la reunión que mantendrán el día 14 de septiembre los ministros de Interior europeos.
"Europa no puede renunciar de ninguna manera a dar asilo a aquellas personas que tengan derecho al mismo. Acoger a personas que son perseguidas en su país es un deber moral", insistió.
Pero después de recordar que él no se opone a implantar un sistema de cuotas, aunque solo sirva para resolver un problema puntual, advirtió: "Hemos de terminar con la política de afrontar los problemas cuando ya tienen una solución muy difícil".
De los 40.000 refugiados que la Comisión Europea pidió en junio que Los 28 se repartieran por cuotas, a España le correspondían 5.837, pero hasta ahora solo ha aceptado encargarse de 2.739. Y el Ejecutivo comunitario reclamó el jueves a los socios que se repartan otros 120.000.
Debido a las reticencias del Gobierno y al impacto emocional de la fotos del niño sirio muerto en la playa de Bodrum (Turquía), autonomías y ayuntamientos se han apresurado a anunciar planes para acoger refugiados. Con ánimo de coordinar esa marea solidaria, el Consejo de Ministros aprobó ayer la creación de una comisión interministerial que se reunirá el lunes, y la próxima semana convocará la comisión de migraciones, de la que forman parte las comunidades y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). La vicepresidenta valenciana, Mònica Oltra, anunció que la comunidad están en condiciones de reubicar a 300 personas y su homóloga de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, ofreció 200 plazas más.
La salvedad de Cameron
Cameron, por su parte, insistió en su rechazo a las cuotas e informó de que el Reino Unido solo acogerá a personas que estén en campos de refugiados de Turquía y Jordania, no a las que traten de llegar a Europa en un viaje que pone en riesgo sus vidas. Hecha esa salvedad, prometió que acogerá a "varios miles" más de refugiados de los previstos. "Trabajaremos con nuestros socios respecto a los detalles", dijo ante Rajoy, antes de reclamar un "enfoque global" de la UE. No concretó la cifra de refugiados que acogerá su país, pero una fuente del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) afirmó que se tratará de no menos de 4.000 personas.
