La popularidad de la canciller alemana, Angela Merkel, ha caído este mes bruscamente a consecuencia de la crisis de refugiados en Europa, según un sondeo de la cadena ARD. El visto bueno a Merkel se redujo cuatro puntos desde agosto al caer hasta el 63% en la encuesta de Infratest Dimap.

Aunque la canciller sigue siendo muy popular en su estado natal, la caída de este mes es muy pronunciada, ya que se trata de un sondeo que solo suele variar un punto o dos cada mes. Se trata de la tasa de apoyo más baja desde diciembre de 2012.

Más de la mitad de los 1.001 votantes que encuestados entre el 31 de agosto y el 1 de septiembre no están contentos con cómo Merkel ha actuado en la crisis de refugiados, descrita por ella como un desafío para Europa mayor que la crisis griega.

Más de la mitad no teme el aumento del número de solicitantes de asilo, pero sí el ascenso del extremismo en el este de Alemania mostrado por la encuesta, donde el desempleo es generalmente mayor que en el oeste y donde la extrema derecha tiene un mayor arraigo.

Precisamente ayer cinco personas resultaron heridas en un incendio en un albergue de refugiados en Hesse.

Alemania, con leyes de asilo relativamente liberales y generosas, es el país de la UE que recibe más migrantes económicos del sureste de Europa y de la guerra en Oriente Próximo. Un récord de 104.460 solicitantes de asilo entraron en el país en agosto y se espera que en total sean 800.000 a finales de 2015, cuatro veces más que los que lo hicieron en 2014.