El parlamento de Hungría aprobó hoy un paquete de leyes que prevén, entre otras medidas, penas de hasta tres años de cárcel por el cruce ilegal de sus fronteras, lo que podría subir hasta cinco años, si se realiza armado o dañando la valla alambrada en la frontera con Serbia.

Con estas leyes el Gobierno conservador nacionalista de Hungría pretende "aliviar la presión migratoria" que registra desde hace meses, en los que más de 160.000 refugiados entraron al país a través de la frontera serbia.

Orban: "Europa debe defender sus fronteras"

El primer ministro húngaro, el conservador nacionalista Viktor Orbán, aseguró hoy que Europa debe defender sus fronteras, ya que en caso contrario podrían llegar al continente decenas de millones de refugiados.

"Si no defendemos nuestras fronteras, de nuevo y de nuevo vendrán decenas de millones a Europa", señaló Orbán en declaraciones a la radio pública "Kossuth", un día después de entrevistarse en Bruselas con la cúpula de la Unión Europea (UE).

Durante sus encuentros con los máximos responsables del Consejo Europeo, Donald Tusk, y del Parlamento Europeo (PE), Martin Schulz, el primer ministro magiar se mostró molesto con las críticas europeas a las polémicas medidas que ha tomado para impedir la llegada masiva de refugiados e inmigrantes a su país.

Ahora Orbán dijo que existe "una importante diferencia de opiniones entre la UE y Hungría", y agregó que la mayoría de los líderes de la Unión defiende que se debería acoger todos los refugiados algo que "significaría el fin de Europa".

Respecto a la propuesta de la Comisión Europea (CE) de repartir los refugiados mediante un sistema de cuotas entre los países miembros el primer ministro dijo que "todo se puede considerar", pero solo si el continente defiende sus fronteras.

Aún así añadió que Hungría no apoyará ninguna propuesta que no signifique una solución. "En la defensa de la frontera hay que mostrarse fuerte", recalcó el primer ministro que consideró que Europa ahora "es rica pero débil".

"De repente, veremos que somos una minoría en nuestro propio continente", ha augurado en declaraciones a una radio local, instando a Europa a "mostrar fuerza protegiendo nuestras fronteras".

Orban reclamó este jueves a los inmigrantes y refugiados procedentes de Turquía que "no vengan" a Hungría porque "Turquía es un país seguro" al ser preguntado sobre la foto del niño sirio muerto en una playa turca que ha conmocionado al mundo.

"Lo que es moral desde el punto de vista humano es dejar claro: Por favor, no vengan. ¿Por qué tenéis que venir de Turquía a Europa? Turquía es un país seguro. Quédense allí. Es arriesgado venir. No podemos garantizar que seáis aceptados aquí", ha dicho Orban, al que se le ha preguntado si tras esta imagen del niño ahogado no es momento de mostrar compasión.

"La cuestión es la responsabilidad. Si creamos la idea o una impresión de simplemente 'vengan porque estamos listos para aceptar a todo el mundo', esto sería un fracaso moral porque este no es el caso", ha dicho en una breve rueda de prensa conjunta con el presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, tras su reunión.

Orban ha insistido en la obligación moral de los Estados miembros de defender las fronteras externas de la Unión y ha incidido en que la normativa europea obliga a registrar a todo inmigrante que llega antes de que pueda abandonar el país. "Estamos cumpliendo la normativa europea", ha zanjado.

"Es mejor para su familia, para sus hijos, para usted, quedarse", ha recalcado Orban. "No nos gustaría falsificar los sueños de la gente", ha aseverado, insistiendo en que "muchos" países de la zona "son seguros", incluido Serbia.

Tusk pide un "nuevo consenso"

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha advertido de que "la prueba más dura e inmediata" a la que se enfrenta Europa es la crisis de refugiados y ha asegurado que trabaja con los líderes europeos para "construir un nuevo consenso" tras admitir que hay "algunas tensiones" y "división" entre países sobre la respuesta necesaria.

"Hay tensiones entre los países. Hay una división entre el este y el oeste de la UE", ha admitido el exprimer ministro polaco, evocando en concreto la propuesta para reubicar a partir de "una base obligatoria para las cuotas", que fue rechazada de plano por una mayoría de países en junio. "Algunos Estados miembro están pensando en contener la ola de inmigración, simbolizado por la controvertida valla húngara", ha resumido el polaco.

"Estamos cumpliendo y cumpliremos nuestra responsabilidad en virtud de la Convención de los Refugiados de la ONU. Pero esto no se puede hacer si sacrificamos el orden público en el proceso", ha avisado. "Las palabras ya no son suficientes en este tema. Tenemos que actuar", ha insistido Tusk, que ha pedido ampliar la misión de la UE contra las mafias de inmigrantes en el Mediterráneo a aguas internacionales "rápidamente".