El Estado Islámico (EI) se reivindicó este martes el supuesto asesinato de un segundo periodista estadounidense, Steven Sotloff, y difundió su presunta decapitación en un vídeo que el Gobierno de EE.UU. investiga para comprobar su autenticidad.

Apenas trece días después de que el EI hiciera público un vídeo que mostraba la decapitación del periodista estadounidense James Foley, la organización de inteligencia Site, que sigue la pista a los movimientos de grupos yihadistas, publicó presuntas imágenes del asesinato de Sotloff a manos de un terrorista del EI.

En el vídeo, titulado "Un segundo mensaje a Estados Unidos", el verdugo de Sotloff atribuye su muerte a los ataques selectivos del Gobierno estadounidense contra posiciones del EI en Irak, y amenaza de muerte a un tercer rehén, el británico David Cawthorne Haines.

La Casa Blanca no confirmó la autenticidad del vídeo, pero aseguró que "la comunidad de inteligencia está trabajando lo más rápido posible para determinarla".

"Si es genuino, estamos devastados por el brutal asesinato de un periodista estadounidense inocente y expresamos nuestras más profundas condolencias a su familia y amigos", dijo a los periodistas una portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Bernadette Meehan.

A través de un portavoz, la familia de Sotloff pidió privacidad y adelantó que no hará comentarios al respecto.

"La familia sabe de esta horrible tragedia y está de duelo en privado", se limitó a indicar el portavoz familiar, Barak Barfi.

El pasado miércoles, la madre del periodista, Shirley Sotloff, había pedido a través de un vídeo al líder del EI, Abu Bakr al Bagdadi, "ser misericordioso" y liberar a su hijo.

Sotloff, de 31 años y que supuestamente fue capturado en agosto de 2013 cerca de la frontera entre Siria y Turquía, aparece en el vídeo vestido con un buzo naranja y arrodillado junto a su verdugo, en un escenario desértico muy similar al que aparecía en las imágenes de la decapitación de Foley.

"Obama, tu política internacional de intervención en Irak estaba destinada supuestamente a proteger las vidas e intereses estadounidenses, pero estoy pagando el precio de tu interferencia con mi vida. ¿Acaso no soy un ciudadano estadounidense?", dice Sotloff en el vídeo.

Junto a él, un hombre encapuchado que asegura ser el mismo que decapitó a Foley aguarda con un cuchillo en la mano y posteriormente habla a la cámara, dirigiéndose al presidente estadounidense.

"He vuelto, Obama, he vuelto por tu arrogante política exterior contra el Estado Islámico, por tu insistencia en continuar tus bombardeos (...) en la presa de Mosul a pesar de nuestras amenazas serias", sostiene el verdugo, vestido totalmente de negro.

"Lo único que han conseguido tus acciones es (perder a) otro ciudadano estadounidense. Mientras tus misiles continúen atacando a nuestra gente, nuestro cuchillo continuará atacando el cuello de tu gente", agrega.

El combatiente lanza también una advertencia "a los gobiernos que entran en esta alianza diabólica de EE.UU. contra el Estado Islámico" para que "retrocedan y dejen a nuestro pueblo tranquilo".

Si el vídeo de Foley terminaba con imágenes de Sotloff como la próxima víctima, la nueva grabación concluye con otro rehén vestido de naranja, identificado como David Cawthorne Haines, que según el diario The Washington Post es un trabajador humanitario británico que fue capturado en marzo de 2013 en la frontera de Turquía con Siria.

La inteligencia estadounidense estudia la posibilidad de que el vídeo de la decapitación de Sotloff fuera grabado en el mismo momento que el de Foley y retenido hasta ahora por los yihadistas para ejercer presión sobre el Gobierno estadounidense.

El escenario casi idéntico y el hecho de que el verdugo de ambos periodistas parezca ser el mismo dan pie a esa hipótesis, pero algunos analistas han recordado que Sotloff aparecía con la cabeza y la barba afeitadas en el vídeo divulgado el 19 de agosto, mientras que en el de hoy se le ve con algo de barba y pelo en la cabeza.

El asesinato de Foley, secuestrado en 2012 en territorio sirio, aumentó a finales de agosto la presión sobre el Gobierno de EEUU para combatir al EI también en Siria, pero la Casa Blanca no tiene por ahora una estrategia militar para ese país, según aseguró Obama el pasado jueves.

No obstante, el Pentágono aseguró hoy que mantendrá sus ataques aéreos contra posiciones del EI en Irak el tiempo que considere necesario para expulsar a la milicia extremista de posiciones estratégicas.