Israel se muestra decidido a llevar hasta el final su invasión de Gaza -un final que fija en la destrucción de todos los túneles que comunican la Franja con su territorio-, pese a que el número de muertos palestinos causados por la operación rebasó ayer los 1.400 y el de heridos se situó por encima de 8.000.

Prueba de su voluntad de seguir adelante es la llamada a 16.000 reservistas para intervenir en un escenario que, solo en las últimas 72 horas, se ha cobrado la vida de unos 300 palestinos. Con la incorporación de los reservistas serán 86.000 los soldados participantes en la invasión de este territorio de 1,5 millones de habitantes.

La sangría humana causada por la operación contra Gaza está alarmando incluso a EE UU, el principal aliado mundial de Israel, que ha sufrido 59 bajas mortales, dos de ellas civiles.

Aunque, por un lado, y en cumplimiento de acuerdos bilaterales, EE UU ha enviado munición de artillería adicional al Ejército israelí, la Casa Blanca ha condenado en los términos más duros el ataque -"inaceptable e indefendible"- del miércoles a una escuela-refugio de la ONU, en el que murieron casi una veintena de personas. La condena, coincidente con otras de la propia ONU y de la UE, ha sido seguida por una llamada a la contención.

Así, el departamento de Defensa pidió a Israel que minimice las bajas civiles en su ofensiva militar en Gaza, por considerarlas demasiado elevadas. "Las víctimas civiles en Gaza han sido muy elevadas y está claro que los israelíes deben hacer más para cumplir con sus elevados y conocidos estándares" de protección de civiles, aseguró a los periodistas el portavoz del Pentágono, coronel Steve Warren.

El presidente Obama pidió, por su parte, un alto el fuego humanitario inmediato y sin condiciones en Gaza. Esta petición es del mismo tenor que otra del Gobierno británico. El Reino Unido está "profundamente preocupado" por la situación y considera necesario "un alto el fuego inmediato e incondicional", afirmó una portavoz oficial de Londres.

"Una vez se alcance el alto el fuego, podremos avanzar a negociaciones más sustantivas sobre asuntos subyacentes, incluyendo las restricciones israelíes sobre Gaza, las condiciones en Gaza y las amenazas a Israel de cohetes y túneles", observó la portavoz.

Para el Foreign Office, "Israel tiene derecho a defenderse, pero debe hacerlo de manera que cumpla con la legislación internacional y con los principios de proporcionalidad y necesidad, a fin de minimizar las pérdidas de vidas civiles". El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, pidió a la ONU que tome medidas para el establecimiento de corredores humanitarios.